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Por: Leonardo Alarcón • Colombia.com

Liga BetPlay: Santiago Mele y una atajada que significó la clasificación a cuadrangulares

El estadio Palmaseca, fue el escenario del partido entre Deportivo Cali y Junior, por la fecha 19 de la Liga BetPlay.

Junior y Deportivo Cali chocaron por la última jornada de la liga. Foto: Facebook Junior
Junior y Deportivo Cali chocaron por la última jornada de la liga. Foto: Facebook Junior

El estadio Palmaseca, fue el escenario del partido entre Deportivo Cali y Junior, por la fecha 19 de la Liga BetPlay.

Palmaseca fue el escenario en el que Deportivo Cali y Junior despidieron el primer todos contra todos del año, pero con un rojiblanco que llegaba a este partido con la presión de no perder, pues un revés en la sultana del valle podría dejar al torneo sin su campeón vigente, si se dan los resultados adecuados.

Así, en un juego muy disputado, con grandes opciones, pero con un Deportivo Cali mucho más incisivo en ataque, transcurrió el primer tiempo en la vía que de Palmira conduce a Cali, en el estadio que sirve de hogar al cuadro azucarero. La gran opción de los primeros 45 minutos, fue conjurada por Santiago Mele, portero del cuadro visitante, que atajó un disparo a quemarropa, al mejor estilo del futsal.

Por el lado rojiblanco, si bien no hubo acercamientos realmente peligrosos, sí alcanzó a pisar terreno del cuadro verdiblanco, aunque no con la efectividad y eficacia de otros partidos por lo que, luego de 5 minutos de adición, el central Wilmar Roldán dio por terminada la primera parte, con un marcador que invitaba al silencio.

No mucho fue lo que cambió a lo largo de la segunda mitad, donde el Cali siguió cargando, ante un Junior que parecía tener un arquero de otro planeta: Santiago Mele, figura del encuentro, parecía que se desplazaba en el tiempo y llegaba a todos los balones peligrosos que mandaba el verdiblanco.

Los de Reyes tuvieron una, en el arco que protegía Alejandro Rodríguez, pero este mismo se encargó de evitarlo, ahogando el grito de gol del visitante, que después no volvió a llegar, quizá porque esperaba, con paciencia, el final del partido y con él, una nueva clasificación a cuadrangulares.

Los marcadores le ayudaban al rojiblanco, que lo que hacía en Cali era aguantar el asedio local, como en la más cruenta de las guerras de independencia latinoamericanas. El reloj avanzaba y, por fin, llegaba a 80 minutos. La espera se reducía, pero el sufrimiento no. En la tribuna, los hinchas verdiblancos revisaban una y otra vez la tabla, pero del descenso, en donde el Cali sigue comprometido. Al final fue empate y clasificación para el rojiblanco, que llega como campeón vigente a cuadrangulares.