Festival de Ancón, la historia del Woodstock colombiano
Un festival ideal para los amantes del rock en Colombia.
Un festival ideal para los amantes del rock en Colombia.
1969, la juventud norteamericana asistía a una cita legendaria, un momento épico que partiría en dos la historia de la música, casi 500 mil personas disfrutaron de 3 días de euforia en el condado de Sullivan en el estado de Nueva York.
The Who, Jefferson Airplane, Jimmy Hendrix, Joan Báez, Santana, Grateful Dead, Janis Joplin, Joe Cocker y Neil Young, entre otros, contribuyeron al delirio de los asistentes con interpretaciones que jamás serán olvidadas.
Colombia no quiso ser ajena al movimiento del rock and roll y toda su psicodelia y decidió organizar su propio Woodstock dos años después del legendario concierto norteamericano y aunque se llamó Ancón por estar próximo a una zona rural llamada así, se le asoció con el festival peruano de Ancón, sin tener ninguna relación.
Organizado en el municipio antioqueño de La estrella, muy cerca a Medellín entre el 18 y el 20 de junio de 1971, este festival abrió las puertas a la pasión rocanrolera en el país a pesar de que la sociedad conservadora de la época lo consideró como una gran reunión de hippies.
Sus gestores fueron el paisa Gonzalo Caro y el bogotano Humberto Caballero y lograron llevar a tierras antioqueñas a bandas como La planta, Columna de Fuego, Carne dura, Gran sociedad del estado, La banda del marciano, Los Monster, Los láser, Conspiración del zodiaco, La banda universal del amor, Terrón de sueños y una banda de rock conformada por algunos miembros de las agrupaciones de música tropical Los Black Stars y Los graduados.
Los Flippers, la banda más popular del momento y la más esperada, no se presentó a pesar de que su nombre figuraba entre los asistentes, pero esto no fue excusa para que los asistentes no pudieran disfrutar de una jornada de rock nacional, así como tampoco lo fue la muy precaria organización del evento, porque en el país no se tenía conocimientos de logística para un acontecimiento similar.
Se movilizaron asistentes desde Bogotá, Cali y la costa atlántica y muchos de ellos acamparon sin importar la lluvia y el frío, 34 años después, en el 2005 se realizó una segunda edición en la que bandas como Kronos, Superlitio, IRA y el exponente de la música protesta de los años sesenta y setenta, Pablus Gallinazo, se presentaron con aire de nostalgia para muchos.
Han pasado casi 50 años y festivales como el multitudinario Rock al parque de Bogotá hacen recordar una época rebelde en un país mojigato que no veía con buenos ojos el rock, pero que ahora reconoce en él, una parte de la identidad nacional.