Para extraer "gases", la NASA abre 'Arca Lunar' de más de 50 años de antigüedad
¿Se imaginan el olor de esos "gases"? El 'Arca Lunar' era la Angsa 73001 de la Misión Apolo 17.
¿Se imaginan el olor de esos "gases"? El 'Arca Lunar' era la Angsa 73001 de la Misión Apolo 17.
Entre las muestras lunares de la Misión Apolo 17, venía la ANGSA 73001 un Arca Lunar que tiene más de 50 años de antigüedad y que ahora los científicos han "abierto" para extraer sus gases. ¿Se imaginan el olor de eso?
“Comprender la historia geológica y la evolución de las muestras de la Luna en los sitios de aterrizaje del Apolo nos ayudará a prepararnos para los tipos de muestras que se pueden encontrar durante Artemisa”, dijo Thomas Zurbuchen, administrador asociado de la Dirección de Misiones Científicas de la NASA en un comunicado.
¿Por qué "abrieron" el Arca Lunar? Los científicos de la NASA aseguran que se trata de una "extracción de gases", que podrán analizar bajo la espectrometría de masas y ahí obtener datos importantes para la misión Artemisa. Algunos consideran que la temperatura del núcleo, era frío y lo que se recolectó en el Arca Lunar, es probable que sean volátiles, pero que se evaporen de forma más rapida, en temperaturas normales de la Tierra.
Según detallan medios especializados, la extracción de gas se hará con el equipo ARES, para tratar de contaminar lo menos posible las muestras y retirar con cuidado la tierra y las rocas del contenedor. Este sistema fue desarrollado por los científicos Alex Meshik, Rita Parai y Olga Pravdivtseva de la Universidad de Washington, Estados Unidos.
Aunque para algunos expertos, se cree que las probabilidades de encontrar gases en el Arca Lunar son infinitamente bajas, no pierden nada con intentar obtener datos valiososo para la próxima misión en la Luna. La muestra será abierta en el Centro Espacial Jonhson de la NASA, en Houston, donde aseguran, también se tiene una colección de "muestras extraterrestres" que son constantemente analizadas por expertos.
Hay que recordar que esta Arca Lunar fue recolectada por los astronautas Eugene Cernan, Harrison Jack Schmitt, en diciembre 1972. "La agencia sabía que la ciencia y la tecnología evolucionarían y permitirían a los científicos estudiar el material de nuevas formas para abordar nuevas preguntas en el futuro", Lori Glaze, directora de la División de Ciencias Planetarias de la NASA.