Por: Jessica Mutis • Colombia.com

Cultivadores en California recurren a robots tras la falta de mano de obra humana

La implementación de estos aparatos tecnológicos significa el mismo gasto que se emplea en un trabajador convencional.

Debido a la cantidad de renuncias tras la pandemia, se han buscado este tipo de soluiones. Foto: www.tortugaagtech
Debido a la cantidad de renuncias tras la pandemia, se han buscado este tipo de soluiones. Foto: www.tortugaagtech

La implementación de estos aparatos tecnológicos significa el mismo gasto que se emplea en un trabajador convencional.

La tecnología, y en específico la puesta en marcha de la inteligencia artificial, siguen revolucionando los mercados y diversos sectores que vienen implementando la robótica cómo solución a problemáticas donde el ser humano no podría llegar, un claro ejemplo es el tema de las catástrofes, donde ya se han venido creando seres con el potencial de ingresar a zonas de difícil acceso por su minúsculo tamaño y gran capacidad de captar información, que a futuro se muestran como una buena vía.

En consecuencia, la falta de mano de obra es otro factor que ha golpeado diversos mercados, uno de ellos es el sector agrícola, afectada en su gran parte por la pandemia donde las inevitables renuncias no dieron abasto debido a los bajos salarios. De acuerdo al diario El Español, en California la agricultura supone cerca de un 3% de su producto interior bruto. El estado exporta más de 25 mil millones de dólares en frutos y vegetales cada año. Pero esta labor e ha visto empañada por cultivos mejor pagos como lo es el Cannabis, indican.

Ante tan situación, la única oportunidad es plantear otras formas de cosechar, por ello Tortuga AgTech, startup localizada en Denver (Colorado), ha dado una luz de salvación con la implementación de robots para la recogida. La compañía fundada en 2016, aseguran que sus robots tienen la misión de encargarse de las “tareas rutinarias, difíciles y repetitivas de llevar a cabo para que los agricultores puedan centrarse en otras labores de mayor valor”. 

Lo que hace a estos artefactos útiles es su estructura la cual viene ensamblada con sensores inteligencia artificial y visión computarizada. Su proceso se centra en distribuirse por las siembras, llegando hasta la planta y, a través de sus cámaras, detectan el fruto. A continuación, un brazo articulado se encarga de recoger el producto y depositarlo de manera segura.

En consecuencia, una de las mayores incógnitas es el nivel de productividad, por ello sus creadores aseveran que la velocidad de recogida se acerca, cada vez más, a la de un humano. Por otra parte, su precisión es del 95%, por lo cual hay un pequeño margen de error.

Aunque estos robots, pueden con los trabajadores que se encargan de limpiar los restos de las cosechas.  trabajar día y noche, requieren un relevo. Es importante señalar, que no todo puede ser color de rosa, ya que estos seres tecnológicos pueden declinar sus labores por problemas técnicos, lo cual paraliza el proceso de recogida durante horas.