Panachi, un símbolo del turismo santandereano que se reactiva

Desde siempre se le han rendido honores a la geografía del Gran Cañón del Colorado y estamos de acuerdo con que a la naturaleza siempre se le deben hacer homenajes, pero en Colombia tenemos uno tan majestuoso como el de los Estados Unidos y lo mejor, este es nuestro y es un orgullo para mostrar a la humanidad.

Ubicado en medio de una geografía agreste pero mágica, el Cañón del Chicamocha es una depresión cuyas montañas abren paso al río de su mismo nombre, que desde lo alto se ve como un hilito, es que los 1.200 metros de profundidad y sus 227 kilómetros de extensión lo convierten en uno de los más grandes del mundo.

El Cañón del Chicamocha ha sido considerado como una de las maravillas naturales del mundo y no hay colombiano o extranjero que al estar allí no sienta la grandeza de la creación y la perfecta mano de Dios que trazó con singular belleza un paisaje celestial.

El Parque Nacional del Chicamocha o PANACHI, para que suene más familiar, fue construido pensando en darle al lugar un sitio que lo representara, este parque temático se ha consolidado con los años como un atractivo turístico que escala posiciones entre los más apetecidos del turismo en el departamento de Santander y también en el país.

En épocas de confinamiento por la emergencia del COVID-19, el parque tuvo que cerrar sus puertas, pero luego de 6 meses y como parte del proceso de reapertura o reactivación de la economía, PANACHI quitó la tranca y en dos fines de semana ha recibido 1.500 turistas, una cifra limitada teniendo en cuenta las circunstancias y las medidas de protección frente al coronavirus.

Con la nueva normalidad y la reapertura de carreteras, el Parque Nacional del Chicamocha se ha convertido en un lugar propicio para visitar y liberarse del estrés debido a que es hermoso y se encuentra a cielo abierto, razón que permite un óptimo distanciamiento social.

Los administradores del parque esperan que la cuota de turistas aumente progresivamente porque el lugar cuenta con todos los protocolos establecidos para garantizar protección ante el riesgo de contagios por COVID-19. Hasta el momento la mayor parte de visitantes proviene del mismo departamento de Santander, pero con el pasar de las semanas, se espera que colombianos de otros departamentos viajen por carretera para disfrutar de un escenario único y de efecto tranquilizante.

El turismo es una fuente importante de empleo en los departamentos colombianos y Santander no es la excepción porque cuenta con destinos apetecidos para propios y extranjeros como Barichara, San Gil, Girón, Bucaramanga, Socorro y PANACHI, un símbolo de la belleza natural santandereana que siempre valdrá la pena visitar, para estando en lo alto y divisar su profundidad no poder evitar decir como un paisano más "¡qué joda tan arrecha, mano!"