La simbología del maquillaje
Cada detalle que utilizamos en el maquillaje nos proyecta algo de la persona, si va muy maquillada, si utiliza la base adecuada, los colores y las líneas que detalla en su rostro o la zona que más potencia.
Cada detalle que utilizamos en el maquillaje nos proyecta algo de la persona, si va muy maquillada, si utiliza la base adecuada, los colores y las líneas que detalla en su rostro o la zona que más potencia.
El maquillaje se desarrolla con base al estilo y el entorno de la persona. Se utiliza para embellecer el rostro y ayudar a cubrir imperfecciones.
¿Muy maquillada o poco maquillada? Todo depende de la situación y el lugar donde se practique el maquillaje. Una persona maquillada en exceso nos puede trasmitir agresividad, fuerza o puede recargarse demasiado y trasmitir inseguridad a causa del exceso del maquillaje. Al contrario, una persona poco maquillada denota timidez, pasividad, sencillez y naturalidad.
¿Neutro o contraste? Usar un maquillaje neutro nos refleja una persona sencilla y cuidadosa, mientras que alguien que utiliza colores en contraste trasmite fuerza siempre y cuando estén en armonía entre ellos. También percibimos sofisticación y un estilo extremado.
¿Marcado o difuminado? Un maquillaje marcado nos trasmite más fuerza, seguridad, profundidad en la mirada, sensualidad en los labios. Si optas por un maquillaje difuminado, trasmitirás elegancia y la imagen de ser una persona cuidadosa.
¿Colores claros u oscuros? Si utilizamos colores claros damos un toque más fino y elegante. Debemos tener en cuenta que los colores claros nos dan volumen y viceversa. Si utilizamos colores oscuros intensificaremos la zona dando así más sofisticación. Los colores oscuros son adecuados para maquillajes de noche.
¿Ojos o labios? Si marcamos los ojos damos profundidad a la mirada, nos da personalidad, fuerza e intensidad en esa zona. Nos proyecta seguridad. Si marcamos los labios trasmitimos feminidad y sensualidad, si es en color rojizo lo potenciamos aun más.
Hoymujer.com