Oración a Santa Josefina Bakhita para peticiones urgentes

Santa Josefina Bakhita, nacida en Sudán en el año 1869, era miembro de la tribu de Daju y fue secuestrada por comerciantes árabes y vendida como esclava cuando tenía tan solo 7 años de edad, momentos en los cuales tuvo que enfrentarse a numerosas adversidades, entre ellas someterse al islam.

Tiempo después fue rescatada por un hombre italiano,  Callisto Legnani,  quien la compró para darle su libertad, la llevó a su país y le permitió encontrarse con la fe cristiana, tomando finalmente la decisión de hacerse religiosa, y llevar una vida de contemplación, servicio y oración, uniéndose a la Congregación de las Hijas de la Caridad de Santa Magdalena de Canossa en Venecia.

A esta santa puedes hacerle todo tipo de peticiones, solicitando su intercesión en tu vida; precisamente, hoy queremos enseñarte una poderosa oración dirigida a ella para rezar en situaciones desesperadas y urgentes, compartida por el portal ‘Aciprensa’.

Oración para peticiones urgentes

¡Oh Dios, Padre de misericordia!, tú liberas a los oprimidos y consuelas a los necesitados, padre bondadoso que nos diste a Santa Josefina Bakhita como hermana universal y modelo evangélico de fidelidad sencilla y de activa caridad, y la enriqueciste con tantos dones y virtudes y dotaste de tan fuerte y profunda fe que ninguno de los tantos obstáculos que encontró en su camino lograron abatirla.

Santa Josefina Bakhita nos dejó un noble ejemplo de santidad, enseñándonos que la virtud y la perfección están al alcance de todos; gracias a su intercesión, danos Señor también a nosotros la posibilidad de creer y amar según nos enseña el Evangelio. Padre, escucha la oración de todo el que invoca con fe la intercesión de santa Josefina Bakhita, y concédenos por su mediación solución para lo que hoy nos desespera y oprime el corazón: (pedir lo que se quiere conseguir).

Santa Josefina, tú que encontraste a nuestro Señor y no te cesabas de decir: “… He dado todo a mi Señor: El cuidará de mi...”…“María me protegía antes que yo la conociese...”, ruega por nosotros y lleva nuestras suplicas ante Ellos, pídeles que nos cuiden en nuestras dificultades y carencias, que nos ayuden en nuestros fracasos y desgracias, y que crezcamos en su amor y en el amor de todos nuestros hermanos, sin distinción de sexo, edad, raza, color, ni condición social.

Ayúdanos para que nos otorguen la gracia de un corazón misericordioso como el tuyo, un corazón tan grande que sea capaz de perdonar aún a quien le causo tanto daño, un corazón capaz de vencer todo el mal con la poderoso auxilio de la fuerza del bien. ¡Santa Bakhita, ruega por nosotros! Así sea.