Tercer domingo de Adviento: ¿qué oración hacer y qué vela debes encender?

Este 17 de diciembre es el tercer domingo de Adviento, por ende, te brindamos una guía sobre la vela que debes encender y la oración que puedes rezar con tu familia.

Oración para el tercer domingo de Adviento: ¿qué vela se debe encender?. Foto: Shutterstock
Oración para el tercer domingo de Adviento: ¿qué vela se debe encender?. Foto: Shutterstock

Este 17 de diciembre es el tercer domingo de Adviento, por ende, te brindamos una guía sobre la vela que debes encender y la oración que puedes rezar con tu familia.

El Adviento es una celebración de la religión católica, la cual representa un tiempo de reflexión y alegría al prepararse para el nacimiento del niño Jesús. Cada domingo se enciende una vela distinta de la siguiente manera: una morada el primer, segundo y cuarto domingo; una rosada el tercer domingo; y una blanca en la Nochebuena.

Precisamente, este 17 de diciembre se celebrará el tercer domingo de Adviento, el cual simboliza la felicidad, al saber que la venida del Señor está cada vez más cerca, por lo cual encenderás la vela rosada; además, te compartimos una oración, publicada por el portal ‘Aciprensa’, para que puedas hacerla en compañía de tus familiares o amigos cercanos.

Ten en cuenta que se debe designar un guía para la oración, y que antes de realizarla es importante encender las otras dos velas de los pasados domingos de Adviento; la tercera será prendida en el momento en el que lo indique la plegaria.

Oración del tercer domingo de Adviento

Todos: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Guía: nuestro auxilio es el nombre del Señor.

Todos: que hizo el cielo y la tierra.

Guía: estamos ya en la tercera semana de Adviento: aumenta nuestra alegría y nuestro júbilo por la venida del Señor Jesús, que está cada vez más cerca de nosotros. Empecemos nuestra oración cantando ‘Ven pronto señor’ (u otro canto apropiado).

Todos cantan: “¡oh Pastor de la Casa de Israel!, trae a tu pueblo la ansiada salvación. Verbo Eterno de la boca del Padre, fuiste anunciado por labios de profeta. ¡Ven pronto, señor! ¡llega, oh salvador! (2v) ¡ven, señor Jesús! ¡ven, liberador! ¡cielos, lloved vuestra justicia! ¡ábrete, tierra, haz germinar al salvador! (2v)”

“El clamor de los pueblos se levanta. Hijo de David, las naciones te esperan. Queremos la llegada de tu Reino. Ven a liberar del pecado a los pueblos. Emmanuel, Salvador de las naciones, eres esperanza del pueblo peregrino. Sol naciente, esplendor de la justicia, Tú nos salvarás con tu brazo poderoso”.

Guía: hoy, vamos a encender la tercera vela de nuestra corona de Adviento. El Señor está más cerca de nosotros y su luz nos ilumina cada vez más. Abramos nuestro corazón, muchas veces oscurecido por las tinieblas del pecado, a la luz admirable del amor de Dios.

Lector: lectura tomada del Evangelio según San Lucas: “la gente le preguntaba: "Pues ¿qué debemos hacer?". Y él les respondía: "El que tenga dos túnicas, que las reparta con el que no tiene; el que tenga para comer, haga lo mismo". Vinieron también publicanos a bautizarse, y le dijeron: "Maestro, ¿qué debemos hacer?"”.

Él les dijo: "No exijáis más de lo que os está fijado". Preguntáronle también unos soldados: "Y nosotros ¿qué debemos hacer?". Él les dijo: "No hagáis extorsión a nadie, no hagáis denuncias falsas, y contentaos con vuestra soldada". Como el pueblo estaba a la espera, andaban Todos pensando en sus corazones acerca de Juan, si no sería él el Cristo; respondió Juan a Todos diciendo: "Yo os bautizo con agua; pero viene el que es más fuerte que yo, y no soy digno de desatarle la correa de sus sandalias.

"Él os bautizará en Espíritu Santo y fuego. En su mano tiene el bieldo para limpiar su era y recoger el trigo en su granero; pero la paja la quemará con fuego que no se apaga". Y, con otras muchas exhortaciones, anunciaba al pueblo la Buena Nueva» (Lc 3,10-18)".

Guía: mientras encendemos la tercera vela de nuestra corona cantemos HOY SE ENCIENDE UNA LLAMA (u otro canto apropiado):

Todos cantan: (Una persona enciende la tercera vela mientras se entona el canto)

“Hoy se enciende una llama en la corona de adviento, que arda nuestra esperanza en el corazón despierto y al calor de la madre caminemos este tiempo. Un primer lucero se enciende anunciando al Rey que viene preparad corazones, allánense los senderos”.

“Crecen nuestros anhelos al ver la segunda llama nacer. Como dulce rocío vendrá el Mesías hecho Niño. Nuestro gozo hoy quiere cantar por ver tres luceros brillar con María esperamos al Niño con alegría”.

Guía: acudamos ahora a Santa María, que colaborando con el Plan del Padre permitió que la luz del Señor ilumine a la humanidad, y pidámosle que siga intercediendo por nosotros en este tiempo de preparación. Entonemos junto a ti, María (puede ser otro canto u oración mariana)

Todos cantan: “junto a ti María. como un niño quiero estar, tómame en tus brazos guíame en mi caminar. quiero que me eduques, que me enseñes a rezar, hazme transparente, lléname de paz. Madre, Madre, Madre, Madre, Madre, Madre, Madre, Madre”.

“Gracias Madre mía por llevarnos a Jesús, haznos más humildes tan sencillos como Tú. Gracias Madre mía por abrir tu corazón, porque nos congregas y nos das tu amor.

Guía: elevemos libremente nuestras intenciones a Dios y respondamos a cada una de ellas diciendo: ven, Jesús, no tardes. (Peticiones libres). Recemos ahora un Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Todos: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.