Por: Karen Benavides • Colombia.com

La relación con las cuñadas es peor que con las suegras

Los celos de las cuñadas podrían ser, incluso, más tóxicos. 

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¿Es más tóxica tu cuñada o tu suegra?. Foto: Shutterstock
¿Es más tóxica tu cuñada o tu suegra?. Foto: Shutterstock

Los celos de las cuñadas podrían ser, incluso, más tóxicos. 

La relación con las suegras suele ser uno de los momentos más tormentosos cuando comienzas un noviazgo, incluso, llega a ser uno de los motivos de ruptura de muchas parejas, pues la familia siempre será un eje fundamental, y sus opiniones siempre tendrán un peso muy grande. 

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Sin embargo, aunque parezca raro, las cuñadas podrían llegar a ser un problema peor cuando no hay una conexión que fortalezca esos lazos de familiaridad. 

De hecho, un reconocido medio chileno realizó una encuesta online para conocer la relación que tenían algunas personas con las hermanas de sus parejas, y el nivel de influencia que tenían en la relación. Los resultados fueron sorprendentes, pues el 56% de los encuestados indicaron que el pariente que no pueden soportar y con quienes tienen mayor número de conflictos son las cuñadas. 

Los motivos

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Si bien es cierto que esto no se presenta en todos los hogares, y muchas veces el trato suele ser bastante positivo, la mala sensación de las hermanas al ingresar una nueva persona a su círculo familiar es más común de lo que piensas. 

La razón principal de dichos celos, probablemente, se debe a la forma en que se les es arrebatado el protagonismo y la atención de su hermano, por ello, comienzan a adoptar actitudes de egoísmo y envidia.

Sin embargo, esto no es del todo malo, pues demuestra el profundo amor que sienten por sus hermanos, y el cuidado que tienen con ellos para que nadie tenga la libertad de lastimarlos. 

¿Cómo superar las diferencias?

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  1. Busca momentos para hablar a solas con tu cuñada, puede que ella tenga una mala impresión de ti que puedes ayudarle a mejorar. Además, también es importante que la conozcas a ella a profundidad para generar confianza.
  2. No intentes imitarla, este es el peor error que puedes cometer. Tienes que aprender a diferenciarte y demostrarle que puedes aportar algo con tu personalidad.
  3. Intenta estrechar los lazos. Aprovecha las reuniones familiares para hacer que ella vea que pueden complementarse muy bien y que respetas su espacio con su hermano.
  4. Evita llevarle mucho la contraria en un principio, puede ser una forma de ponerte a prueba para conocer tu capacidad de respuesta y el respeto que sientes por ella.