¿Problemas con el olor corporal? Algunos alimentos podrían ser los responsables, descube cuáles

El mal olor corporal es una preocupación común que puede afectar la confianza y las interacciones sociales de muchas personas, no por nada en el mercado existen infinidad de opciones de champús, jabones, lociones, perfumes y demás productos cuya función es hacernos sentir frescos y oler rico todo el día. Si bien la higiene personal y una buena rutina de cuidado son factores cruciales para oler bien, es importante que sepas que la dieta también juega un papel fundamental en el olor que emana nuestro cuerpo. 

Si por más que te bañas y te aplicas cremas, perfumes o lociones con fuertes aromas no dejas de oler fuerte, es probable que tu alimentación te esté jugando una mala pasada. Por eso, en este artículo te compartimos cinco alimentos que probablemente no sabías qué podrían ser los causantes de tu mal olor corporal para que limites o disminuyas su consumo y pongas fin a este problema.

De acuerdo con un artículo publicado en el portal Mejor con Salud, revisado por la nutricionista Maria Patricia Pinero Corredor, “el mal olor se produce por un desbalance corporal ocasionado por diferentes factores, como la propagación de bacterias, el exceso de sudor o alimentos que modifican el ph y la acidez del cuerpo”. Entre estos alimentos están:

• Tomate: las personas que consumen mucho tomate tienen mayores probabilidades de sufrir de mal por corporal dado que el aroma del aceite de los tallos de los tomates es muy parecido al olor del sudor de las axilas. La razón principal sería que al olor del sudor le afectan los carotenoides y terpenos presentes en esta fruta. 
• Productos lácteos: este tipo de alimentos son ricos en lactosa, por lo que quienes son intolerantes a esta encima pueden emanar un mal olor al no poder procesarla correctamente en su organismo. “Cuando no acabamos de tolerar la leche, tras consumirla, el sudor huele a col”, señala el portal citado. 
• Pescados: este tipo de proteínas, en especial la trucha y el atún, son conocidas por su alto contenido de vitamina B4, que puede intensificar el aroma corporal. El impacto puede ser tan significativo que algunas personas pueden experimentar la trimetilaminuria, comúnmente conocida como "síndrome de olor a pescado".
• Granola: este tipo de alimentos que se presentan como una opción muy saludable y baja en calorías estimulan la producción de gases si se consumen en exceso, lo que puede llegar a ser muy incómodo y oloroso. 
• Ajo y cebolla: evidentemente estos dos ingredientes tienen un aroma muy fuerte que puede quedar impregnado en nuestra boca; sin embargo, consumirlas en exceso también puede producirnos un mal olor corporal, ya que acumulan sustancias que son eliminadas a través del sudor y los pulmones.