2 madres y sus 5 hijos fueron encarcelados en Rusia por protestar contra la invasión a Ucrania

La invasión de Rusia a Ucrania es un acto que el mundo condena, pero, aunque la mayoría de las personas crean que los propios rusos apoyan esta acción de su Gobierno, la realidad muestra que no todos los habitantes de la patria de Vladimir Putin están de acuerdo con las determinaciones del ex agente de la KGB.

Las protestas y muestras de rechazo a la acción armada, que, sin ninguna exageración podría ser el detonante para una tercera guerra mundial, aumentan con los días alrededor del mundo, y en la propia Federación de Rusia, también se producen.

En un caso que ha causado consternación y que es una muestra de lo radical y autoritaria que es la fuerza pública en Rusia, 5 niños y sus madres fueron detenidos y encerrados en una celda por hacer parte de una muestra de rechazo a la invasión a Ucrania.

Los menores y sus madres solo llevaban pancartas con mensajes en los que pedían el cese de la invasión a Ucrania y también ramilletes de flores que ubicaron frente a la embajada de este país en Moscú, la capital de la Federación de Rusia.

Ekaterina Zaviziuon, una de las madres detenidas, sabía que el solo hecho de manifestarse en contra de la invasión rusa a Ucrania podría traerle problemas, así se lo hizo saber un amigo que fue testigo de cómo la Policía arrestaba y golpeaba a centenares de personas que se instalaron en la plaza Pushkin sin siquiera llevar pancartas o gritar arengas.

La madre rusa fue junto con su amiga Olga y sus hijos, 5 menores con edades de 7 a 11 años, pero la Policía no consideró bien visto su simbólico acto y los arrestó, pero no contentos con ello, los recluyeron en una celda como si fuesen delincuentes.

El confinamiento de niños en una celda generó el rechazo de la sociedad internacional, mientras que el temor por represalias evitó que los medios se pronunciaran rechazando el hecho en un país en el que las manifestaciones u opiniones en contra de las determinaciones de Vladimir Putin son duramente castigadas.

Las imágenes de los pequeños detrás de las rejas llorando le dieron la vuelta al mundo y demuestran que para Vladimir Putin la fuerza va en contra de quien se le oponga, no importa si es un niño, muestra de ello sucede en Ucrania en donde ha ordenado el bombardeo de las ciudades dejando un saldo trágico de fallecidos, entre ellos decenas de menores.

Los policías amenazaban a los niños con dispararles si no dejaban de llorar y ellos, junto con sus madres, estuvieron detenidos durante 4 horas.