Por: Juan Carlos García Sierra • Colombia.com

Necoclí cerca de crisis humanitaria por migrantes que quieren cruzar la selva del Darién

La Personería de Necoclí en Antioquia advierte sobre la posibilidad de una crisis humanitaria en el municipio ante el represamiento de migrantes que quieren llegar a EE.UU. a través de Panamá. 

Las playas de Necoclí están atiborradas de migrantes venezolanos que esperan viajar a Panamá. Foto: Youtube
Las playas de Necoclí están atiborradas de migrantes venezolanos que esperan viajar a Panamá. Foto: Youtube

La Personería de Necoclí en Antioquia advierte sobre la posibilidad de una crisis humanitaria en el municipio ante el represamiento de migrantes que quieren llegar a EE.UU. a través de Panamá. 

La región del Urabá en el departamento de Antioquia vive desde hace un par de años una difícil situación por la afluencia de migrantes que quieren llegar a los Estados Unidos por Centroamérica, iniciando el recorrido a pie por la selva del Darién en Panamá, país limítrofe con Colombia.

Las imágenes de algunos municipios antioqueños atiborrados de personas provenientes de Venezuela y las Antillas esperando para poder dirigirse en una lancha hasta la costa panameña e iniciar su recorrido hasta los Estados Unidos se convirtieron en cotidianas en épocas de pandemia, pero con el pasar del tiempo se han transformado en insoportables.

Centenares de familias, en especial haitianos y venezolanos llegan a Necoclí, municipio antioqueño, con la idea de pasar hasta Panamá, la mayoría son familias con niños pequeños que corren todos los riesgos imaginados para cumplir con el sueño americano, que en muchos casos es una pesadilla dantesca vivida en una selva inhóspita e infernal.

La Personería de Necoclí advierte al país que la situación es de crisis humanitaria, porque a diario llegan 2.000 personas esperando tomar una lancha hacia Panamá para iniciar el recorrido por el Tapón del Darién, pero solo 1.000 pueden hacerlo, por lo tanto, quienes no viajan se quedan en el municipio, la mayoría en lamentables condiciones de mendicidad.

En ente indicó que las playas del municipio son ahora el lugar en donde decenas de cambuches son armados por los migrantes, la mayoría provenientes de Venezuela, y la situación de inseguridad en Necoclí es mayor, además, la fuerza pública disponible resulta minúscula ante la cantidad de personas que llegan a diario.

Wilfredo Menco teme que con la afluencia de personas viajando desde Acandí, en el departamento del Chocó, hasta Panamá, este país decida cerrar la frontera y ocasione que se represen extranjeros en el municipio, tal como ocurrió en el 2021 cuando 22.000 de estos generaron una situación de hacinamiento en la población antioqueña.

La recepción de extranjeros en tránsito por Colombia se realiza por cuestiones humanitarias, pero desde hace un par de años, en época crítica de pandemia, se ha pedido para que el Estado colombiano sea rígido con los extranjeros que se quedan en el país de manera irregular en este parte del país, sin embargo, mucho se habla y poco se hace, y el problema cada vez es mayor.

Las historias de familias que se aventuran a cruzar la selva del Darién, pero alguno de sus miembros muere, en especial los niños, son el triste pan de cada día, pero a pesar de lo escabroso que parezca, nada de esto desanima a los migrantes en su afán de alcanzar el sueño americano.