Bélgica perdió y dejó una pobre imagen previo al mundial

El estadio Jaber Al-Ahmad, en el corazón de Kuwait City, la capital de Kuwait, es el escenario en el que se miden Bélgica, seleccionado europeo que prepara su debut en el mundial de Catar, programado para el próximo 23 de noviembre, frente a Canadá y Egipto, que si bien no alcanzó a clasificar a la Copa del Mundo, se prepara para asumir la clasificación a ala Copa de África, que empezará en marzo del año próximo.

El onceno comandado por Mohamed Salah, estrella del Liverpool inglés, viene de dos victorias en dos encuentros amistosos, un contra la selección de Níger y el otro frente a la selección de Liberia. De otro lado, los dirigidos por Roberto Martínez quieren ser protagonistas en Catar, por lo que buscan poner el equipo a punto, para la competencia que se viene. Luego de su encuentro cancelado frente a la selección de Irak, los Diablos Rojos juegan contra Egipto, en el que sería el único partido amistoso del conjunto europeo, previo al mundial.

Al minuto 33 Kevin de Bruyne pierde un balón en la cabeza de área con Mustapha Mohamed que sin esperar dispara al poste izquierdo de Courtois, anotando el primero del encuentro. El marcador es un reflejo del partido, con una selección belga que no pudo romper la férrea defensa egipcia que, aguantó la embestida y esperó paciente su oportunidad.

Los dirigidos por Roberto Martínez poco pudieron hacer al cierre del primer tiempo para recomponer el camino, dándole la victoria parcial al equipo africano, que está afuera del mundial. Sin mucho más por decir, el telón de la primera mitad se bajó con victoria para Egipto por un gol.

El inicio del segundo tiempo mostró un Bélgica volcado al ataque, dejando grandes espacios atrás. Así, cuando apenas corría el minuto 46, Mohamed Salah lanzó un balón profundo, capturado por Mahmoud Trézéguet que, sin marca, avanzó hasta la portería custodiada por Courtois y anotó el segundo de la jornada.

Al 76, un desborde por la banda izquierda de Yannick Carrasco, termina en centro para Louis Openda que se adelanta a sus marcadores y define a la salida del portero, para descontar y darle un respiro al equipo belga. El gol termina siendo un premio a la posesión -por momentos larga y sin profundidad- ejercida por los Diablos Rojos.

Los últimos minutos mostraron una Bélgica que más con fuerza que inteligencia intentó vulnerar la defensa egipcia, que permaneció ordenada, aguantando la embestida de los europeos. Al final, los egipcios se impusieron, dejando ver una muy pobre selección de Bélgica que, incluso, llega al mundial como la única de su grupo que perdió su último partido antes del inicio del torneo.