‘Zurdo’ López: Junior y el imborrable título que le arrebataron de las manos a Atlético Nacional

Sin duda, aquella final del Fútbol Profesional Colombiano, ocurrida el domingo 19 de diciembre de 2004, en el estadio Atanasio Girardot, es una de las más recordadas por los hinchas de Junior y Atlético Nacional.

Los barranquilleros, flamantes campeones de aquella edición, por haber logrado el título ante uno de los más grandes del país y los del otro lado, por la forma en la que se terminó dando. Y es que, los hinchas locales ya empezaban a dibujar la octava estrella.

Pero, además, la definición del título, para cualquier hincha neutral, terminó siendo sensacional, pues Junior empezó ganando 3 por 0 en el partido de ida, por lo que no parecía que Atlético Nacional tuviera mucho qué hacer. Sin embargo, casi logra la épica.

En el banco del verdolaga estaba Juan José Peláez, campeón del FPC en 1994, con este mismo club, mientras que en la otra esquina se sentaba el histórico Miguel Ángel zurdo López, legendario estratega del Junior, que falleció esta mañana de lunes.

En la tribuna el ambiente era de resignación, pero de esperanza por lo que significaba un 3 a 0 en contra, pero a los 16 minutos Edixon Perea puso el 3 a 1, devolviendo a la vida un estadio que, en un principio, parecía resignado a la derrota.

Aquivaldo Mosquera, a los 21, encendió la mecha del verde esperanza, pero Martín Arzuaga, a los 39, le devolvió la tranquilidad al zurdo López, que quería sumar su primer título en Colombia, con el tiburón. Así, con el reloj marcando, más o menos, las 4 de la tarde, Óscar Julián Ruiz, central aquella tarde, señalaba el final del primer tiempo.

Atlético Nacional volvió conectado del descanso y, al 59, al 63 y al 68, el mismo Mosquera, Carlos Díaz y Héctor Hurtado, voltearon la torta y encaminaron al verde a su octava estrella, con un global que ya estaba 5 – 4. Sin embargo, todavía el final no estaba escrito.

Junior se volcó contra la portería de Milton Patiño, buscando desesperadamente el gol, presionando y manteniendo el balón sin que los locales pudieran hacer nada. Todo esto tendría su premio pues, a los 88, el argentino Walter Ribonetto anotaría uno de los goles más cantados por la hinchada juniorista.

Una nostálgica definición del título, desde el punto blanco

El estadio Atanasio Girardot parecía reventarse, mientras Martín Arzuaga caminaba hacia el punto blanco, cantando la inmortal Matilde Lina, compuesta por el maestro Leandro Díaz. Se paró frente al balón, para hacer una pausa que fue eterna para los asistentes al estadio.

Avanzó hacia el esférico y, con un fortísimo derechazo cruzado, venció a Milton Patiño para silenciar el estadio y proclamar a Junior como el segundo campeón de 2004, con el zurdo López celebrando, por primera vez, un título en el FPC.