Por: Karen Benavides • Colombia.com

Prueba militar de Rusia puso en riesgo a los astronautas de la Estación Espacial Internacional

Rusia destruyó uno de sus satélites como parte de una prueba militar, generando escombros cerca de la Estación Espacial Internacional y poniendo en riesgo a los astronautas por una posible colisión.

Astronautas de la Estación Espacial tuvieron que refugiarse por riesgo de colisión. Foto: Shutterstock
Astronautas de la Estación Espacial tuvieron que refugiarse por riesgo de colisión. Foto: Shutterstock

Rusia destruyó uno de sus satélites como parte de una prueba militar, generando escombros cerca de la Estación Espacial Internacional y poniendo en riesgo a los astronautas por una posible colisión.

Son 7 los astronautas que actualmente se encuentran en la Estación Espacial Internacional, quienes tuvieron que refugiarse durante dos horas el pasado lunes, 15 de noviembre, por un aparente riesgo de colisión de escombros que orbitaban muy cerca, producto de la destrucción de un satélite de Rusia como parte de una prueba militar.

Estas personas, permanecieron durante un tiempo en cápsulas acopladas, en caso de que tuvieran un escape rápido, tal como lo dio a conocer la NASA; en este momento en la EEI se encuentran trabajando dos astronautas estadounidenses, uno alemán y dos cosmonautas rusos.

Aunque muchos cuestionaron esta acción de Rusia, catalogándola como irresponsable por poner en peligro a las personas que están en este momento en el Espacio, el país se defendió afirmando que se trató de un ensayo de un misil antisatélite, y que está en todo su derecho, tal como anteriormente lo realizaron otros países como China, la India o Estados Unidos.

Y es que, fueron más de 1.500 restos espaciales identificables los que se generaron, los cuales circulan en la misma órbita que la Estación, a unos 400 km de altura, y más 8 km por segundo. “Había que cruzar los dedos y ponerlos (a los astronautas) en sus respectivas cápsulas. ¡Algunos objetos pasaron a menos de 1 km!... por ahora, la ISS no debería volver a pasar por la misma zona que los restos. ¡Pero claro que los astronautas tuvieron miedo!“, comentó un funcionario de la Agencia Espacial Europea (ESA) para AFP.

Además, la misma organización explicó que no es algo que deba tomarse a la ligera, pues un simple proyectil de un centímetro podría generar un daño importante en la estructura, teniendo en cuenta la velocidad a la que viaja, y uno de más de 10 centímetros podría provocar la desintegración de una nave.

De hecho, el peligro podría no haber terminado, pues sería mayor en las próximas semanas, o incluso en los próximos meses, según los expertos, motivo por el cual el objetivo de la NASA es rastrear estos objetos que se han convertido en basura espacial para evitar un efecto dominó “si hay más restos hay más posibilidades de impactar satélites, o sea, hacer explotar otros y así sucesivamente. A esa velocidad, cualquier impacto hace explotar la superficie“, agregó el funcionario.

Por su parte, Rusia se mantiene en que no tenía obligación de avisar sobre sus ensayos de misiles antisatélite; "no tenemos que informar a nadie cuando probamos nuestros sistemas antimisiles o antisatélite. No tenemos obligación de hacerlo", indicó el general Vladímir Dvorkin, exdirector del Instituto de Investigación Nº 4 del Ministerio de Defensa de Rusia.