Catedral de sal de Zipaquirá fue reconocida con importante mención

La denominada primera maravilla del mundo se mantuvo en ese lugar que le fue otorgado desde el año 2018, además la Catedral de Sal compitió con templos de reconocimiento mundial como El Partenón de Atenas y La Capilla Sixtina.

Ubicada en el municipio de Zipaquirá Cundinamarca, es un destino imperdible para propios y visitantes su creación se debe, a los depósitos de sal que fueron hallados a 180 metros bajo tierra en medio de la zona montañosa del municipio de Zipaquirá y que se presupone tiene más de 200 millones de años de antigüedad. Con el tiempo y la intervención del humano se ha convertido en un recorrido de 8.500 metros cuadrados llenos de arte y experiencias inimaginables guiadas. 

Entre los atractivos de este especial recinto, se destacan el espejo de agua, la cúpula, la ruta del minero, el muro de escalar y el show de ‘mapping’. Así mismo, cabe resaltar que el éxito para construirlo fue el resultado de un arduo trabajo pues se requirieron 127 mineros y 110 talladores, además de 250.000 toneladas de roca salina para convertirse en un espacio cultural temático dedicado a la minería, la geología y los recursos naturales.

El primer lugar le fue otorgado a la Grand Mezquita Sheikh Zayed ubicada en Abu Dabi que se ha mantenido en esta posición hace años, se destacada especialmente por todas las incrustaciones de cristal de Swarovski en las paredes del santuario que marcan el camino para los visitantes.

De acuerdo a Blu Radio,  Yenny Páez, gerente de la Catedral de Sal de Zipaquirá manifestó “Las nuevas experiencias como el espectáculo de mapping es un formato único e imponente que combina arte, tecnología e innovación, impactando sobre la bella y majestuosa arquitectura rocosa de la Catedral de Sal, y la película 3D, un corto animado en donde se descubre la interesante historia de la formación del Domo Salino y los métodos de explotación que llevaron a construir este majestuoso espacio por la mano del ser humano”. 

Según Colparques, las salinas de sal de Zipaquirá datan de una existencia milenaria pues fueron explotadas por los Muiscas quienes además de su uso tradicional, hicieron de ella su principal intercambio, su moneda. Por ello esta fue causa de muchas discordias y guerras entre los diferentes pueblos de esta tribu indígena, quienes trataban de ejercer el dominio absoluto de ese precioso bien.