Las 5 prácticas de ocultismo más populares en Colombia

A pesar de que Colombia dice contar con un elevado número de personas ligadas al catolicismo, las prácticas oscuras, conocidas también como hechicería, satanismo u ocultismo, han tenido en lo largo y ancho del territorio, un santuario en donde se han movido con comodidad.

Hace algunos años, investigaciones periodísticas de rigor como las de Fidel Franco Forero, determinaban que Colombia es uno de los tres países del mundo en donde más adoración a satanás existe, y con la libertad de cultos, promulgada al amparo de la Reforma Constitucional de 1991, estas prácticas han dejado de ser algo muy secreto.

Quien practica el ocultismo, generalmente tiene un pacto con las más oscuras profundidades del mal para lograr lo que se propone. Hoy en Colombia.com conoceremos las prácticas más conocidas del ocultismo.

Tabaquear a alguien

Consiste en fumar un tabaco o cigarrillo muy cerca de la persona y esparcir el humo sobre su humanidad. El aire es considerado como el espacio del pensamiento, por eso, un tabaco “rezado” y esparcido hace que el infortunado personaje piense noche y día, pensará tanto que podrá alcanzar la locura.

Fluidos corporales 

Las secreciones del cuerpo como saliva, orina o sangre son mantenidas expuestas en lugares que la persona víctima del maleficio no encuentre, la permanente presencia de un objeto con dichos fluidos, dominan su alma y lo ligan con quien desea tenerlo.

Entierros

Es una práctica popular en la que con una fotografía enterrada en un cementerio o con un muñeco al estilo vudú, se busca causar daño a la salud de la persona lentamente, generalmente se debilitan sin que haya explicación médica, en palabras de uso común, el paciente se seca.

Dominación mental

Mediante la intercesión de brujos expertos se logra que una persona acceda a los deseos de otro sin importar la distancia, las personas víctimas, cambian su estado anímico de manera radical y sufren de permanente depresión.

Rezar a la muerte

En rituales se le reza a lo que llaman los ocultistas, santa muerte. A ella se le hacen promesas con tal de que el afectado sufra el mayor daño posible en todos los aspectos.

Tristemente la lista puede ser muy grande porque en Colombia existen odios y rencores, y la violencia que siempre nos ha azotado ha vinculado a gentes de todas las condiciones a estar cerca de estas prácticas, que aunque muchos las nieguen, saben que existen y hacen mucho daño.