Oración a San Cirilo y Metodio para pedir protección

San Cirilo fue un monje que fundó la literatura eslava y se le atribuye la creación de numerosos textos litúrgicos; se encargó de evangelizar diferentes lugares en compañía de su hermano, San Metodio, quien sí llegó a ser obispo y tradujo la Biblia a la lengua eslava.

A ellos puedes dirigirte en diferentes circunstancias, según los momentos por los que estés atravesando en tu vida; hoy te enseñamos una oración, compartida por el portal ‘Conexión Migrante’, para solicitar su intercesión, con el fin de que cuiden la iglesia y te protejan como fiel seguidor de la Palabra de Dios.

Oración de protección

Oh, San Cirilo y San Metodio, misioneros incansables que llevaron la luz de la fe a los pueblos eslavos, sedientos de verdad; haced surgir en la Iglesia vocaciones misioneras para que el anuncio del Cristo Crucificado y Resucitado, llegue a los hombres de hoy.

Oh, Santos Cirilo y Metodio, que en vuestro difícil y duro apostolado misionero, permanecieron siempre unidos a la Iglesia de  oriente y de occidente, hagan que las dos Iglesias hermanas, la Iglesia Católica y la Ortodoxa, superen con caridad y verdad las divisiones y lleguen pronto a la plena unidad. 

Oh, Santos Cirilo y Metodio, ustedes que empujados por el amor de Cristo abandonaron todo para seguir el Evangelio, protejan a la Iglesia de Dios: al Papa, a los Obispos, los sacerdotes, religiosas y religiosos, los misioneros, los laicos, los que sufren. Que cada uno de nosotros sea un “obrero” de la mies del Señor. ¡San Cirilo y San Metodio, rueguen por nosotros!.

Oración de San Metodio a la Virgen María

San Metodio también nos comparte una increíble plegaria dedicada a la Madre de Todos, la Virgen María, para honrarla y pedir su misericordia; fue compartida por el portal ‘Oraciones Para’ y te la enseñamos a continuación:

Vuestro nombre, oh Madre de Dios, está lleno de todas las gracias y bendiciones divinas, Vos habéis llevado en vuestro seno al que es incomprensible, y alimentado al que alimenta a todo el universo. El que llena el Cielo y la tierra, el Señor del mundo, ha querido seros deudor, por haberle Vos revestido de la carne humana que antes no tenía.

Regocijaos, oh Madre, oh sierva de Dios, pues tenéis por deudor al que da el ser a todas las criaturas. Nosotros somos todos deudores de Dios, pero Dios es deudor vuestro. Así es, oh santísima Madre del Salvador, que vuestra bondad y vuestra caridad exceden a las de todos los otros Santos, y que en el Cielo podéis más que todos ellos cerca de Dios, porque sois su Madre. ¡Ah!, nosotros, que celebramos vuestras glorias y comprendemos cuan excelsa es vuestra bondad, os suplicamos que os acordéis de nosotros y de nuestras miserias. Amén.