Rutina facial para piel grasa o mixta: productos esenciales para controlar el brillo y evitar imperfecciones

Si tienes la piel grasa o mixta debes saber que la rutina de cuidado facial y los productos que usas son clave para controlar este problema. Aunque en el mercado existen infinidad de opciones, no todas son buenas para eliminar el exceso de brillo, prevenir imperfecciones o mantener el cutis saludable y equilibrado. 

Una piel grasa o mixta tiene requerimientos especiales, ya que determinadas cremas, sérums e incluso bloqueadores pueden incrementar el problema al ser demasiado espesas u oleosas, favoreciendo no solo la producción de grasa, sino también la obstrucción de los poros y la aparición de brotes o acné. 

Rutina facial para pieles grasas o mixtas 

Según expertos en dermatología, cosmética y cuidado facial, una piel grasa o mixta debe enfocar su rutina en la limpieza profunda y la hidratación para evitar la acumulación de sebo que provoca granos y comedones. 

Según Suzanne Piqueras, Directora Corporativa de Tratamiento Facial y Protección Solar de Yanbal, dicha rutina facial consiste en 3 pasos esenciales: limpieza profunda, hidratación equilibrada y tratamiento focalizado.

Paso a paso

1. Limpieza profunda

La limpieza es el primer paso para controlar la producción de grasa. Se recomienda el enjuague del rostro dos veces al día con un limpiador espumoso suave, preferiblemente con ácido salicílico o glicólico, que ayuda a eliminar el exceso de sebo y células muertas sin dañar la barrera cutánea.

Según la experta, otro de los ingredientes fundamentales para las pieles grasas es la Niacinamida, que remueve impurezas, maquillaje y sebo sin resecar, mantiene el microbioma equilibrado y reduce el enrojecimiento e irritación.

2. Hidratación ligera

A diferencia de lo que muchos piensan, las pieles grasas también necesitan hidratación. Omitir este paso en la rutina facial puede provocar mayor producción de sebo. Se aconseja el uso de hidratantes sin aceite, en gel y con ingredientes como ácido hialurónico, ceramidas y niacinamida. 

Estos productos mantienen el equilibrio hídrico sin ocluir los poros ni aportar brillos excesivos. Lo importante es elegir fórmulas que humecten sin aportar brillo, controlen el sebo y minimicen la apariencia de poros.

3. Tratamiento y protección

Muchas personas evitan el protector solar en el rostro debido a su textura densa y grasosa; sin embargo, este paso es fundamental para protegerse del sol y evitar las manchas. En el mercado existen diferentes opciones especiales para piel grasa. 

La recomendación de los expertos es elegir un SPF de 30 o superior con fórmulas libres de aceite y no comedogénicas, preferiblemente en presentación en gel o agua para una sensación más agradable y ligera.

En combinación, se aconseja tratar los granitos de forma localizada con fórmulas que contengan ácido salicílico, Bakuchiol y retinyl palmitate, ingredientes que contribuyen a: regenerar las células de la piel, mejorar su textura, disminuir las cicatrices causadas por imperfecciones y prevenir nuevos brotes y favorecer un proceso de renovación celular equilibrado.

Otros pasos que puedes implementar en tu rutina facial semanal son la exfoliación con productos con salicílico, glicólico o mandélico, evitando los que tienen partículas abrasivas y la aplicación de retinoides que aceleran la renovación celular, regulan glándulas sebáceas y previenen los comedones.