Trucos para aliviar el dolor de los pies al usar tacones

Las mujeres sabemos lo frustrante que es querer lucir unos hermosos tacones, pero rehusarse a hacerlo por el miedo a terminar con un molesto e insoportable dolor en los pies; y es que no es para menos, pues la posición en la cual deben estar los pies al usar este tipo de calzado resulta ser muy perjudicial.

No te preocupes más por eso, ya no tendrás que mortificarte por tener que usar siempre zapato plano, pues te traemos algunos consejos para que logres pasarte al calzado alto sin que tengas que sufrir ningún tipo de consecuencia.

No elijas tacones exageradamente altos

Si bien es cierto que son hermosos, usar zapatos demasiado altos puede hacer que la sangre no circule bien por tus pies, y en este caso, aliviar el dolor y la inflamación es casi que imposible. Elige una altura intermedia y que tengan un poco de plataforma, pues esto le da mayor comodidad.

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Utiliza plantillas anti-deslizantes en gel

Este tipo de plantillas están elaboradas con un material especial de gelatina, para que puedas ponerlas en zapatos cerrados o abiertos, con el fin de que el pie no se deslice mientras caminas. Además, el gel se convierte en una especie de amortiguador en cada pisada.

Adáptalos a tu piel

Por lo general los zapatos ceden, por lo que probablemente sentirás al principio algunas molestias, pero con el tiempo irán desapareciendo. También puedes utilizar el truco de llenarlos con papel periódico para que el tejido se ajuste mucho más.

Prepárate antes de usarlos

Antes de ponerte tus tacones, camina descalza por un largo tiempo, puede ser mientras te alistas y haces todas las cosas en tu hogar; luego, encoge y estira los dedos de los pies por aproximadamente 10 minutos.

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Utiliza un gel antiinflamatorio

Las largas jornadas con tacones hacen que los músculos de las piernas se vean afectados, por ende, utiliza un gel antiinflamatorio en el empeine y el gemelo para aliviar el dolor.

Masajéalos al llegar a casa

Una vez termine tu jornada, estira tus pies y masajéalos con crema para que descansen; además, puedes meterlos en agua caliente con sal para que la presión disminuya. Así mismo, puedes darte baños de agua fría y agua caliente, alternándolos cada 5 minutos; esto hará que la circulación mejore.