Estudio revela la razón de por qué nos sonrojamos cuando sentimos vergüenza
El cuerpo humano tiene respuestas a diversas situaciones y estímulos.

El cuerpo humano tiene respuestas a diversas situaciones y estímulos.
La vergüenza es una emoción humana que a menudo nos mueve a ocultar defectos, rasgos o acciones que consideramos no están bien vistas por la sociedad y nos haría perder la dignidad.
“Se puede decir que la vergüenza es la emoción que surge cuando valoramos nuestras acciones como negativas, esto es que estamos haciendo algo mal y que eso va a llevar a los demás a hacer juicios negativos sobre nosotros”, explican los expertos en psicología de la web Psicoglobal.
Cuando nos enfrentamos a una situación que nos avergüenza, es común que nuestras mejillas tomen un color rosado intenso, el cual es más o menos notorio dependiendo de nuestro tono de piel, pero ¿por qué ocurre esto?, un reciente estudio reveló la respuesta.
De acuerdo con investigadores de la Universidad de Ámsterdam, quienes pusieron a prueba a un grupo de personas para analizar las reacciones de su cuerpo ante la vergüenza, el rubor en nuestras mejillas se debe a una mayor actividad del cerebro asociada con la excitación emocional.
Los participantes del estudio fueron citados a cantar canciones conocidas pero de alta dificultad como "Hello" de Adele y "Let it Go" de la película "Frozen", con el propósito de someterlos a un mayor estrés por el temor a equivocarse.
Estas interpretaciones artísticas fueron grabadas y semanas más tarde se las enseñaron para analizar qué tanta vergüenza sentían al verse cantando este tipo de canciones. El estudio se llevó a cabo con jóvenes de entre 16 y 29 años, principalmente mujeres.
Los participantes fueron colocados en un escáner de resonancia magnética para observar su actividad cerebral y además fueron conectados a sensores de temperatura. La se mostraron más avergonzados e incómodos al ver sus propias actuaciones que las de los demás.
El estudio publicado en la revista Proceedings of the Royal Society B, concluyó que el enrojecimiento de las mejillas propio de emociones como la vergüenza no solo está relacionado con la pena y la exposición, sino con la estimulación del cerebelo, que causa una respuesta inmediata y automática.
Según los expertos, esta expresión humana no solo se asocia a la preocupación de cómo nos perciben los demás. En realidad sería parte del pensamiento inconsciente y la autocrítica.
“Estos hallazgos muestran que el rubor se asocia con la activación de áreas cerebrales involucradas en la excitación emocional, lo que sugiere que puede ocurrir independientemente de los procesos sociocognitivos de orden superior”, indica la investigación.