Síndrome de dolor regional complejo: niña padece la enfermedad más dolorosa del mundo

Bella Macey, una niña australiana de 10 años de edad, sufrió una terrible infección y posteriormente fue diagnosticada con una rara enfermedad que hasta el día de hoy ha sido catalogada como la más dolorosa del mundo, la cual le ha arrebatado toda su infancia pues ya no puede hacer las mismas actividades que hacía antes, y necesita de una silla de ruedas para movilizarse.

Se trata del síndrome de dolor regional complejo, “un tipo de dolor crónico que suele afectar a un brazo o una pierna”, que por lo general “suele desarrollarse después de una lesión, una cirugía, un accidente cerebrovascular o un ataque cardíaco. El dolor es desproporcionado en relación con la gravedad de la lesión inicial”, según explica ‘Mayo Clinic’.

Medios de comunicación australianos, como el programa televisivo ‘A Current Affair’, se han encargado de difundir el caso de Bella, sin embargo, no se trata de un padecimiento desconocido, pues recientemente Netflix estrenó el documental ‘Cuiden a Maya’, que habla sobre este diagnóstico y lo que tuvo que pasar una familia durante todo su proceso.

Y es que, profesionales aseguran que es una enfermedad para la que no existe aún ninguna cura, por lo cual los tratamientos se basan en el control del dolor para mejorar un poco la calidad de vida de la persona que la padece.

Tal como lo han dado a conocer los medios, y sus propios padres, Bella ya perdió la movilidad de su pierna derecha, hasta la ingle, y permanece postrada en una cama o en una silla de ruedas, pues los dolores son insoportables y hasta la hacen gritar; no tolera ningún toque o sensación en su pierna y pie, ya no puede jugar con amigos ni asistir a la escuela, y tampoco ha podido volver a usar pantalones, pues el roce es insoportable.

Al parecer, todo inició cuando realizaron un viaje familiar a Fiji, donde la pequeña contrajo una infección a través de una ampolla en su pie que le provocó el roce de sus sandalias, pues la herida nunca sanó; posteriormente, tras manifestar molestias, la llevaron al médico y le diagnosticaron el síndrome de dolor regional complejo.

Y es que, aunque ha tomado medicamentos intensos para el dolor, ninguno le ha funcionado, y en Australia no hay una clínica con un tratamiento disponible para esta enfermedad. Es por esta razón que Bella debe ser remitida a Estados Unidos, para recibir lo que necesita por parte de la Clínica Spero, especializada en este tema, utilizando terapias innovadoras con fisioterapia y técnicas de neuroestimulación.

No obstante, teniendo en cuenta los elevados costos que no pueden cubrir, han pedido ayuda a la comunidad, a través de donaciones en la plataforma GoFundMe, pues solo de esta manera aumentan las probabilidades de que esta niña vuelva a caminar y pueda tener una vida “normal”, aunque no pueda curarse por completo de aquel doloroso padecimiento.