Consternación en Antioquia: empresaria reportada como desaparecida apareció incinerada en una finca

Un nuevo hallazgo sorprendió a un campesino en una finca del municipio de Caldas. El hombre, quien realizaba labores de campo, quedó consternado al encontrar el cuerpo incinerado de una persona en la vereda el 60, sector el Comino, hecho que se reportó el pasado 25 de enero. 

De inmediato el hombre dio aviso a las autoridades, quienes llegaron al lugar para hacer la inspección, sin embargo, ante la falta de material no encontraron mucha información, ya que por el estado del cuerpo no pudieron establecer las condiciones de su muerte y mucho menos identificar de quién se trataba.

La historia tomó un giro inesperado.  Georgina David Montoya, una mujer de 68 años, quien residía en un conjunto residencial de Itagüí y quien se distinguía como una empresaria hotelera, había sido reportada como desaparecida por parte de sus familiares y amigos en días anteriores, más exactamente el 15 de enero. 

De acuerdo con El Colombiano, la mujer conocida como Gina, había tomado la decisión de quedarse en su casa en Itagüí mientras que su familia viajaba a una finca para disfrutar de las vacaciones.

La mujer se quedó bajo el cuidado del perro de uno de sus hijos, sin embargo, el lunes siguiente la familia trató de contactarla para conocer cómo estaba ella y su mascota, pero el mensaje nunca fue recibido, la mujer no contestó a las llamadas y mensajes que sus familiares le habían dejado, razón por la cual se alertaron de que algo extraño había sucedido.

Su angustia no era en vano, al llegar a la vivienda se encontraron con todo desorganizado. En un primer momento, pensaron que se trataba de un secuestro; no obstante, el perro permanencia en la vivienda sin ninguna pista que pudiera guiarlos para entender qué había sucedido. 

Posteriormente, decidieron instaurar la denuncia en la Fiscalía. Con el transcurso de los días eran pocas las respuestas de su paradero. “Lo último que se vio de ella fue que a las 5:00 de la tarde del domingo había salido de su casa con el perro y luego había regresado”, señaló El Colombiano.

De acuerdo con los familiares de Georgina, la última persona que entró a su casa, según los vigilantes de la unidad donde vivía, era alguien con quien estaba asociada para el negocio de los hoteles. “Y se conoció que tenía planeado ir a hacer algunos arreglos en uno de estos establecimientos”, agregó el medio de comunicación.

Además, señalaron que el día de la desaparición, se llevaron joyas, dinero en efectivo y una libreta en la que la mujer llevaba los datos de las cuentas de los negocios personales. Insistieron en que no tenía amenazas, pero que sí tenía algunos problemas domésticos con vecinos que había puesto en manos de una inspección de Policía de Itagüí.

Así las cosas, tras las búsquedas y las solicitudes en Medicina Legal, el jueves, 18 días después de la desaparición, los familiares de la víctima recibieron una llamada en la cual les manifestaron que tenían el cadáver de una mujer que podía corresponder a las características de Georgina, refiriéndose a los restos incinerados encontrados por el campesino. 

“Por medio la carta dental, a la cual accedieron los forenses de Medicina Legal, se pudo establecer que la mujer hallada en Caldas era ella. Uno de los hijos y el esposo de ella fueron a la morgue y reconocieron algunos otros detalles que les permitió confirmar el lamentable desenlace que tuvo”, detalló El Colombiano.

El pasado miércoles 4 de enero, la mujer fue despedida en Jardines de Montesacro, en una ceremonia a la cual asistieron sus familiares y amigos. Entre tanto, investigadores se encuentran estudiando todos los posibles detalles que puedan esclarecer el crimen y que puedan ayudar a encontrar a los culpables, pues su familia no descarta que esto tendría que ver con su socio del hotel.