Atentado contra Miguel Uribe Turbay: ¿dónde están las pertenencias del menor implicado?
La Fiscalía reveló dónde terminaron las pertenencias del menor que le disparó a Miguel Uribe Turbay, incluido su celular.

La Fiscalía reveló dónde terminaron las pertenencias del menor que le disparó a Miguel Uribe Turbay, incluido su celular.
La desaparición del celular y otras pertenencias del menor implicado en el atentado contra el senador Miguel Uribe Turbay ha generado inquietud entre las autoridades y la opinión pública. Según la Fiscalía, este dispositivo y otras pertenencias clave para esclarecer los hechos y descubrir posibles autores intelectuales, fueron manipuladas por miembros de la red criminal involucrada.
En medio de la audiencia contra Elder José Arteaga, alias El Costeño, acusado de ser el coordinador logístico del atentado contra el precandidato presidencial Miguel Uribe, el ente investigador presentó nuevos detalles del caso y habló sobre la eliminación de pruebas tras el ataque.
De acuerdo con las autoridades, tras el atentado, algunos de los implicados se reunieron en un bar en la localidad de Santa Fe para planear la desaparición de pruebas que podrían ayudar a dar con su paradero.
Durante la conversación, acordaron vender el celular de alias El Costeño. Para dicho fin, la acusada Katerine Martínez, alias Gabriela, indicó que el dispositivo fue formateado para ser entregado a alias ‘El Hermano’ con el fin de que realizara el negocio por un valor de 300.000 pesos.
'Elder preguntó si sabía dónde podrían venderlo y por cuánto. Elder le sacó la sim card, formateó el celular y se lo pasó a 'el Hermano' para que lo vendiera al menos en 300 mil pesos", relató Gabriela.
¿Qué pasó con las pertenencias del menor que le disparó a Miguel Uribe?
Por otro lado, respecto a las pertenencias del joven implicado, la fiscalía señaló que fueron arrojadas al río Bogotá por Carlos Eduardo Mora para eliminar cualquier tipo de evidencia. Entre los objetos estaban: el celular utilizado por el joven, una chaqueta y una gorra roja.
"Se ha verificado que se han ocultado elementos. Algunos de los celulares han sido vendidos. Otro celular fue arrojado al río Bogotá", comentó la fiscal en la audiencia.
La investigación reveló que los autores intelectuales utilizaron a un menor de edad para cometer el atentado contra Miguel Uribe con la finalidad de obtener una sanción penal menos severa.
Según Gabriela, la idea era reclutar a un joven de 14 o 15 años, para que fuera juzgado como menor de edad y no como adulto. Al parecer, el joven fue engañado, ya que le habían ofrecido varias posibilidades para huir después de cometer el crimen.