Donald Trump: Camioneros que transiten por carreteras de Estados Unidos deben dominar idioma inglés

Donald Trump, en su cruzada contra la inmigración ilegal quiere hacer uso de todas las herramientas que están a su alcance, pero también con la facultad que le confiere el ser el mandatario de los Estados Unidos de redactar diferentes órdenes ejecutivas que, si bien no son una ley, pueden ser el inicio de una normativa.

El mandatario republicano hace frente a la inmigración ilegal, un problema que según él fue acrecentado por la anterior administración de Joe Biden, quien fue flexible, muy laxo y permitió el ingreso masivo de inmigrantes indocumentados a través de la frontera, pero el actual jefe de estado no solo atribuye permitir el ingreso libre de inmigrantes indocumentados a Joe Biden, sino que, además, lo culpa de protegerlos, brindarles garantías y facilitar sus solicitudes de asilo.

Ciudades Santuario en la mira

Uno de los primeros puntos que anunció Donald Trump que atacaría con su llegada al poder en los Estados Unidos es el de las ciudades santuario, aquellos lugares robustecidos en el mandato de Joe Biden que acogían a los inmigrantes ilegales y les prestaban ayuda básica como hospedaje, salud, alimentación, pero también colaboraban con la obtención de trabajos para ellos y trámites de estatus para su permanencia en el país. 

Donald Trump quiere acabar con la condición de lugares blindados para la ley migratoria que tienen las ciudades santuario, generalmente gobernadas por miembros del partido demócrata, actual partido de oposición y que fue la colectividad política del expresidente Joe Biden.

Donald Trump libra una particular batalla contra el idioma español y esto se ha hecho evidente desde su posesión como mandatario al ordenar eliminar el idioma español de la página oficial de la Casa Blanca, además, desde épocas de campaña presidencial había mostrado su interés en exigir que todos los inmigrantes en los Estados Unidos hablen inglés.

Inglés en la carretera

Justamente, el idioma de Cervantes, que hace poco estuvo de fiesta, se ha convertido en una especie de piedra en el zapato, o tal vez, en el camino, debido a que el mandatario pretende exigir que todos los camioneros que transiten carreteras de EE.UU. hablen inglés, pues es bien sabido que el comercio entre los Estados Unidos y México hace que un gran número de camioneros provenientes del país del sur ingresen con mercancías a territorio estadounidense y muchos de ellos, en gran medida, no hablan inglés.

La orden ejecutiva de exigir idioma inglés a los camioneros o transportadores comerciales obedece a la intención de hacer más seguras las carreteras y brindar seguridad a las familias estadounidenses, y a aquellos que no logren certificar su dominio del inglés se les revocará su licencia o permiso para transitar por vías de los Estados Unidos.

Esta iniciativa evidencia los diferentes intentos de Donald Trump y su administración por desterrar el idioma que habla el mayor porcentaje de inmigrantes indocumentados en los Estados Unidos, y en la lucha contra la inmigración, la deportación es la principal herramienta y el principal fin, y se denuncia por parte de inmigrantes indocumentados que las órdenes de expulsión de inmigrantes como los llevados hasta El Salvador, se encontraban en idioma inglés, cuando la normatividad exige que los notificados con deportación o expulsión deben recibir una notificación en un idioma que comprendan.