Remigración: Un funcionario de origen latino lidera la mano dura contra los inmigrantes en EE.UU.

Las medidas que Donald Trump y su equipo de gobierno está impulsando en contra de la inmigración ilegal son para muchos defensores de inmigrantes, organizaciones y ciudadanos, extremas y rayan en el racimo.

Marco Rubio, origen cubano y látigo contra inmigrantes

Marco Rubio, secretario de Estado, sería el encargado de llevar a cabo una política de remigración a través de una oficina que estaría destinada a seguir de cerca los procesos de deportación y autodeportación de inmigrantes, pero también se encargaría de implementar los ´valores occidentales´ remplazando a los organismos de derechos humanos en el Departamento de Estado.

Donald Trump insiste en su deseo de expulsar del país a inmigrantes indocumentados por ´las buenas o por las malas´ y asegura que la permanencia de indocumentados en los Estados Unidos obedece a una ´invasión´, pero ataca a Kamala Harris, funcionaria estrella del gobierno de Joe Biden y encargada de los asuntos migratorios en el cuatrenio pasado, culpándola de promover el ingreso de millones de inmigrantes ilegales al país.

Trump solo quiere inmigrantes de primer nivel

El mandatario, próximo a cumplir 79 años, también se muestra partidario de no conceder reajuste de estatus para casos de asilo y quiere cerrar la puerta del país a los refugiados de todo el mundo.

De manera paradójica, Marco Rubio será el encargado de dirigir está política de estado contra los inmigrantes, siendo este funcionario de origen latino, hijo de inmigrantes que llegaron como ilegales a las costas de los Estados Unidos desde Cuba, por eso se asegura que ´no hay cuña que más apriete que la del mismo palo´.

La iniciativa gubernamental está consignada en un texto de 136 páginas que ya está siendo analizado por el Congreso de los Estados Unidos para ser sometido a su aprobación, pero desde ya es objeto de polémica porque se considera que su enfoque es racista y que promueve una ´limpieza étnica´, al adoptar un modelo implementado por regímenes de derecha en diferentes países a lo largo de diversos años en la historia.

Asesores convencidos de sus ideas

A pesar de que Marco Antonio Rubio García ha sido designado como secretario de Estado a liderar la nueva conformación de las políticas migratorias de Donald Trump, pero el verdadero cerebro es Stephen Miller, asesor del jefe de Estado, y un convencido de que para combatir la inmigración ilegal es necesaria la remigración.

El concepto de remigración ha sido desarrollado en Europa y entre sus exponentes está el austríaco Martin Sellener, considerando que para lograr una sociedad equilibrada o étnicamente homogénea se debe expulsar a los indocumentados y deportar a los residentes legales con crímenes o que se conviertan en una carga para la nación.