Redadas: La increíble historia de amor de un ´gringo´ y su esposa latina

Cuando han pasado más de dos semanas de la posesión de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos, los casos de detenciones a inmigrantes con estatus de residencia sin definir, más conocidos Como ilegales o indocumentados, han generado todo tipo de reacciones y también de historias.

Mientras se conocen historias de abusos de las autoridades de migración en contra de familias de indocumentados, también se ha visto como otros prefieren aprovechar la situación y hacerse pasar por agentes del ICE para atemorizar a inmigrantes, de igual manera, en las redes sociales muchos han mostrado su satisfacción con mensajes plagados de racismo y estigmatización ante las detenciones.

En medio de toda esta situación, también hay historias en las que el sentido humanitario prevalece, es el caso de una mujer hispana naturalizada estadounidense que realiza las compras y lleva al colegio a los hijos de sus vecinos para evitar que estos sean detenidos en la calle por agentes de inmigración.

Una verdadera historia de amor se vive en medio de estas dificultades y la protagoniza una pareja compuesta por un estadounidense y una mujer hispana que se casaron, pero ante la condición irregular de la mujer, el hombre decidió conseguir un segundo trabajo para evitar que ella salga a la calle y se exponga a ser detenida.

Dicen que el amor lo puede todo y en estos asuntos de la lucha contra la inmigración ilegal se pone en evidencia, por eso la historia de esta pareja ha dado vueltas por las redes sociales y a muchos ha conmovido y tocado sus fibras interiores.

El hombre obtuvo un segundo empleo como repartidor porque su esposa inmigrante no ha definido su permanencia legal y no puede volver a su trabajo, de manera que él prefirió dejar que ella se quedara en casa mientras trabajaba a doble turno para poder mantener los gastos de la casa.

La mujer ya se encontraba en proceso de obtener su residencia, pero ante las deportaciones masivas de las últimas semanas, aún corre riesgo de ser detenida, pues ni ella ni su esposo consideran que ser inmigrante indocumentado sea sinónimo de delincuencia. 

La política de exportaciones masivas de Donald Trump está afectando a muchas familias porque en algunos casos los padres son detenidos y deportados mientras sus hijos quedan en territorio estadounidense a la deriva y sin quién vele por su sustento.