Al Nassr se defiende: "No estamos buscando la Copa del Mundo de 2030

Recientemente, el club de la primera división de Arabia Saudí, Al Nassr, presentó a Cristiano Ronaldo, delantero que ha vestido las camisetas del Sporting de Portugal, Manchester United, Real Madrid y Juventus. El hecho de que el cuadro árabe, administrado por el primer ministro y heredero al trono del reino de Arabia, hubiese fichado a uno de los mejores jugadores del fútbol moderno, generó toda clase de aseveraciones.

De hecho, no en pocos medios de comunicación empezó a difundirse la idea de que el fichaje tendría una intención más allá de romper el mercado de transferencias del país medio oriental y sacudir las registradoras de los estadios, con la venta de entradas. Se empezó a especular, de hecho, que la compra obedecía a toda una estrategia de mercadeo cuyo objetivo principal era un solo: Llevar al país árabe la Copa del Mundo de 2030.

Y así la historia se difundió de tal manera que, en las últimas horas, el club directamente relacionado, el Al Nassr donde ataja el colombiano David Ospina, debió salir a detener estos señalamientos, aclarando que dicho club no tiene la intención soterrada de buscar dicho objetivo. En palabras de la organización deportiva, “El contrato de Cristiano Ronaldo no implica ninguna apuesta por la Copa del Mundo”.

“Al Club Al Nassr le gustaría aclarar que, contrario a los reportes de la prensa, el contrato de Cristiano Ronaldo no implica ninguna candidatura para la Copa del Mundo. Su principal preocupación está con el club y con sus compañeros, buscando ayudarlos a lograr los objetivos propuestos”.

De esta manera el club buscará disipar los comentarios surgidos, según los cuales el fichaje del portugués obedecían, sobre todo, al objetivo autoimpuesto de la federación de fútbol de Arabia Saudí, de procurar por la organización del campeonato mundial de la FIFA de 2030, en la que se cumplirían 100 años desde la primera realizada en Uruguay.

Recordemos que Cristiano Ronaldo llegó al cuadro de Rudi García libre, tras varios inconvenientes con el cuerpo técnico y la cúpula dirigencial del Manchester United, en una relación que terminó absolutamente rota y que tuvo su último capítulo en una entrevista que concedió la estrella, previo al inicio del campeonato del mundo. En ella el futbolista apuntaba contra la ainterna del club inglés y su dirigencia, a la que acusaba de traición.

De esta forma y tras dos años de contrato, el portugués terminaba su segundo paso por los red devils, luego de ser apartado del equipo dirigido por Erik Ten Hag y sus declaraciones a la prensa. Su llegada al club de la familia real saudí se dio tras concretar un contrato multimillonario que le proporcionaría a la estrella un salario de 200 millones de euros por temporada, hasta 2025.