Álvaro Montero fue la figura de Millonarios, evitando el empate del Boyacá Chicó

Un marco espectacular recibió a embajadores y ajedrezados, que se encontraron por la segunda fecha de los cuadrangulares semifinales, donde el cuadro embajador llegaba con la oportunidad de lograr, en su casa, de sumar 3 puntos y picar en punta del grupo B, con la ventaja del punto invisible que obtuvo al clasificarse a esta fase en el segundo lugar.

Así pues el embajador, quizá el gran candidato a quedarse con el título, luego de un proceso encarnado en Alberto Gamero que está por cumplir 4 años, saltó a la grama del Campín de Bogotá, con el objetivo de llevarse por delante al ajedrezado, en la búsqueda del cupo a la final que entrega esta zona.

El rival, que empató en la primera fecha contra América de Cali, llegaba a Bogotá con la necesidad de recuperar los puntos que América le arrebató en su casa, por lo que tendría que salir a jugar, lo que posiblemente le daría ventajas al equipo local. El balón rodó y, de inmediato, Millonarios de dejó ver como ese equipo agresivo, que a la menor oportunidad cobra, aunque el buen esquema defensivo del cuadro boyacense no permitía la llegada del gol local.

Los visitantes aguantaron hasta el minuto 37, momento en el cual, tras una linda jugada previa, donde el embajador tocó el balón de lado a lado de la cancha, llegó el gol en los pies de Leonardo Castro, que recibió de espaldas entre los centrales y pudo llevar el balón hasta adentro, disparando por el palo del portero.

La alegría pareció no durarles mucho a los 25 mil hinchas que acudieron esta noche al coloso de la 57, luego de que el VAR viera una mano en el área embajadora sobre el cierre de la primera mitad, que terminaría convirtiéndose en penalti. El encargado de cobrar fue Geimer Balanta, quien no pudo convertir el lanzamiento pues, el buen portero embajador adivinó el lado y lo detuvo.

El segundo tiempo mostró a un Millonarios relajado, que supo aguantar los enviones del rival, al que le permitía llegar hasta donde el local quisiera. Así, los minutos de este segundo capítulo pasaban, sin que los de Gamero sufrieran un asedio constante y agobiante del cuadro boyacense. Al minuto 62 Elikn Mosquera vio la tarjeta roja, luego de que le fuera mostrada la segunda tarjeta amarilla, por una fuerte falta sobre Leonardo Castro.

Esta expulsión, contuvo aún más el ya boicoteado espíritu de lucha del cuadro ajedrezado. EL partido llegó a los últimos minutos y el marcador no sufría alteración alguna, lo que perduró hasta el final. El resultado termina dejando con 4 unidades a los dirigidos por Gamero, a falta de lo que ocurra entre América y Medellín, este domingo. Por lo pronto, Millonarios ahora visitará el pascual guerrero y al América, mientras Chicó hará lo propio, en la casa del Independiente Medellín.