Por: Jessica Mutis • Colombia.com

Esta es la razón por la que los astronautas no pueden consumir pan en el espacio

Saber sobre las condiciones en las que habitan los astronautas en el espacio siempre es un tema interesante y más por qué estas son muy diferentes a las que tenemos en la tierra.

Las migas de pan son el problema. Foto: Shutterstock
Las migas de pan son el problema. Foto: Shutterstock

Saber sobre las condiciones en las que habitan los astronautas en el espacio siempre es un tema interesante y más por qué estas son muy diferentes a las que tenemos en la tierra.

Este tema de conversación surgió en la misión Gemini III de 1965, cuando el piloto John Young llevó consigo un sándwich de carne en conserva en su traje espacial. Estando allí, lo sacó y le dio un mordisco, tuvo tiempo de compartirlo con su compañero el comandante Virgil «Gus» Grissom, pero antes de que pasara un minuto lo guardaron pues este empezó a desmoronarse rápidamente y algunas migas empezaron a flotar, suponiendo un serio problema al no poder controlarse y llegar hasta lugares peligrosos.

"las migas que se desprenden al morder y los líquidos cuando se beben sin el empacado adecuado pueden dañar el equipo o ser inhalados accidentalmente por los astronautas mientras flotan dentro de la nave espacial. El espacio no es lugar para un sándwich de mantequilla de cacahuete y mermelada. La miga del sándwich puede causar problemas. En cambio, la mantequilla de cacahuete por sí sola está bien. Los alimentos pegajosos se pueden comer con un tenedor o una cuchara", explican desde la Nasa.

Por su parte el portal de ciencia y tecnología Slash Gear, explica que las migas de pan o galletas, flotan y pueden volar hacia los ojos de un astronauta e interferir con equipos importantes y hasta causar un incendio, añaden en el medio Insider. Una solución dada por los expertos han sido las tortillas pues no contienen migas en cantidad son fáciles de almacenar y además se conservan por mucho más tiempo.

Por otra parte, la investigadora Hope Hersch en 2021 recibió un fondo de 22.000 euros para continuar desarrollando una tecnología para el consumo de este producto mediante una "bolsa de plástico" que en el futuro puede expandir sus posibilidades a otros productos de bollería, explican desde Ondavasca.

Así mismo señalan que se esta se llama "bolsa especial multipropósito" hecha de etileno propileno fluorado (FEP, por sus siglas en inglés), que se usa en los procesos de donación de sangre, ya que permite la entrada de oxígeno con el que la sangre se mantiene "viva". En el caso de las bolsas del pan espacial, resistentes a temperaturas extremas, su interior contendría los ingredientes secos y serían empaquetadas en la Tierra.