Día Mundial del Folclore: ¿De dónde nacieron los nombres de las regiones de Colombia?
Cada 22 de agosto se celebra el Día Mundial del Folclore, resaltando las tradiciones, música y expresiones artísticas.
Cada 22 de agosto se celebra el Día Mundial del Folclore, resaltando las tradiciones, música y expresiones artísticas.
Colombia es uno de los países que logra representar folclore a través de la música, las tradiciones de cada región y su cultura, fomentando así la llegada de extranjeros y los mismos locales que se interesan por conocer el folclore del país.
Hoy 22 de agosto se celebra el Día Mundial del Folclore, para homenajear aquellas expresiones artísticas y autóctonas que reflejan las tradiciones, costumbres y rasgos culturales de las regiones en varias partes del mundo, resaltando la identidad nacional.
Este término fue utilizado por primera vez en el año 1846 por el arqueólogo británico William Jhon Thoms, quien escribía artículos donde expresaba el saber del pueblo relacionando términos como Folk (pueblo) y lore (saber), además de estos inicios también se rinde homenaje a las tradiciones culturales de los pueblos.
Teniendo en cuenta que para seguir enorgulleciéndonos de la cultura de los departamentos colombianos con base a la música, bailes, celebraciones y muestras artesanales, Preply realizó una investigación sobre el origen de las palabras y también sobre la traducción literal, el origen etimológico y la historia detrás del nombre de cada uno de los departamentos de Colombia.
Muchos de estos se asocian con vocablos de culturas indígenas, personas históricas y referencias geográficas, de esta manera se empezó a analizar los siguientes:
Amazonas: Este término hace referencia a las míticas guerreras amazónicas y puede interpretarse como ‘sin pecho’ (a-mazos), “basado en la leyenda que decía que estas mujeres guerreras se amputaban un pecho para manejar mejor el arco y la lanza”, indica el informe.
Antioquia: El nombre se dio en honor a la región de Antioquía en Asia Menor (actual Turquía), denominada así por los colonizadores españoles. Esta deriva del nombre griego Antíoco, que significa “opuesto a” o “resistente”.
Arauca: Toma su nombre del río Arauca, que a su vez proviene de una tribu indígena araucana. Puede traducirse como “trompetear” o “sonido fuerte”, refiriéndose posiblemente al ruido del agua del río o a la naturaleza del terreno.
Atlántico: Su nombre se da por su ubicación geográfica y proviene del titán griego Atlas, que se creía sostenía el cielo.
Bolívar: Se habría nombrado en honor a Simón Bolívar, líder de la independencia de Colombia, Venezuela, Bolivia y Ecuador.
Córdoba: Lleva ese nombre en honor a José María Córdoba, un héroe de la independencia de Colombia.
Cundinamarca: es una deformación del término chibcha Kuntur Marga, que vendría a significar ‘lugar del cóndor’.
Guainía: Se deriva de la palabra indígena que significa “tierra de muchas aguas”.
Guaviare: Proviene de la combinación de dos palabras indígenas, “guabiyar” y “yari”. “Guabiyar” es una palabra de origen guahibo, una etnia indígena que habitaba la región, palabra que significa «hondo, profundo» en referencia a las aguas del río Guaviare. Por otro lado, “yari” es una palabra en lengua wanano y se traduce como «río grande» o «río poderoso». Así, el nombre “Guaviare” se interpreta como “río hondo y poderoso”.
Huila: De origen indígena y significa “anaranjado”.
La Guajira: fue nombrado así a partir de la denominación del Wayuu en Guajiro, que significa “gente, persona que respeta y sigue las normas sociales establecidas”.
Magdalena: Nombrado de esta manera por los colonizadores españoles en honor a Santa María Magdalena, que significa “fortaleza, castillo”.
Meta: es el río Meta, que deriva de la palabra indígena “meeta” que significa «río resplandeciente».