En Colombia existe un festival muy curioso que celebra la existencia de las brujas

La Jagua es un corregimiento que pertenece al municipio de Garzón, Huila, y es el esenario ideal para revivir y enaltecer la labor de las Brujas junto a su histori, estas mujeres hechiceras y gitanas llegaron al territorio en épocas coloniales, atraídas por las tradiciones indígenas. Sembrando de tal manera el misticismo y la cultura en los lugareños que las ven como una figura de poder. 

 

Su ubicación yace exactamente entre la desembocadura del río Suaza y el río Magdalena, sus casas coloniales que albergan cerca de 3000 habitantes, están hechas en materiales antiguos, cuenta con calles empedradas y da la impresión de que todo se detuvo en el tiempo, situación que adorna aún mejor la festividad. 

 

De acuerdo al portal Seminariovoz, fueron los españoles los que llamaron a La Jagua territorio de brujas. Cuando los ibéricos llegaron a esta tierra vieron que eran solo mujeres indígenas quienes hacían las prácticas religiosas a sus dioses. Debido a que la figura masculina, había migrado a las montañas a organizar la resistencia contra los invasores.

“Los españoles tenían la visión que las mujeres que hicieran algún ritual o vendieran algún medicamento para un dolor de cabeza eran consideradas automáticamente como brujas, donde había que quemarlas vivas por tener relaciones con los demonios. En conclusión, para los españoles invasores estas sacerdotisas indígenas eran diabólicas. De ahí que La Jagua, fue llamada, «tierra de brujas»”.

Entre tanto, al transcurrir el tiempo por esta tradición marcada, los habitantes decidieron apropiarse de dicha situación y alabar de una manera más positiva a estas mujeres. Yesenia, la representante legal de la Asociación cultural para la transformación social a través del arte 'Jaguarte', menciona a Radionacional “Queremos mostrar toda la magia que tenemos en nuestro interior. La bruja tenía un profundo conocimiento de las plantas, sus capacidades curativas y para sacar las malas energías”. 

 

Este año, el evento tuvo lugar del 4 al 7 de noviembre reuniendo cerca de 30.000 visitantes, quienes disfrutaron al son de la música autóctona, danzas, y demás eventos culturales y gastronómicos. Se destacó además el tradicional Desfile de Comparsas con la temática especial de Mitos y Leyendas de Colombia, el Reinado de la Magia y el Encanto con la temática “Bruja Catrina”, donde se escogió una “bruja” encargada de representar a la Jagua además de convertirse en la próxima embajadora de la Ruta Embrujo Ancestral.

 

Sin duda Colombia es un extenso país que protege sus tradiciones y se siente orgulloso de celebrar la vida con eventos populares, cada rincón del territorio tiene su historia, y por ello esta es una invitación para no dejar de conocer el terruño descubriendo nuevas culturas y festividades.