Por: Karen Benavides • Colombia.com

Recomendaciones para una lonchera saludable

Aprovecha el regreso a clases para cambiar la rutina alimenticia de tu hijo.

Lonchera saludable para tus hijos. Foto: Shutterstock
Lonchera saludable para tus hijos. Foto: Shutterstock

Aprovecha el regreso a clases para cambiar la rutina alimenticia de tu hijo.

Falta poco para el regreso a clases y vuelve una de las preguntas más comunes de los padres de familia es, ¿qué alimentos deben incluir en la lonchera de sus hijos para que sea saludable y para que les aporte todos los nutrientes que necesitan en su etapa de crecimiento?

Para ayudarte a tener una idea más clara, aquí te dejamos estos 4 alimentos que no pueden faltar en las onces de los pequeños.

Fruta 

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Las vitaminas y las fibras que diariamente los niños necesitan para el correcto funcionamiento de su metabolismo se encuentran en las frutas. Este es el alimento que, definitivamente, no puede faltar en la lonchera de un niño, pues aporta a las defensas y evita problemas de digestión. Es importante que evites mezclar frutas dulces y ácidas, puedes alternarlas por días para que sea más agradable al comer.  

Un carbohidrato

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Los niños necesitan energía para todas sus labores diarias, tanto para los momentos de concentración mientras estudian, como en los espacios de esparcimiento, por esta razón es importante que complementes su dieta con carbohidratos, pueden ser unas galletas, barras de cereal o un sándwich.

Una proteína 

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Las proteínas son pilares fundamentales para el óptimo crecimiento de los menores. Los lácteos son una gran opción para incluir en la dieta alimentaria de los recreos, puedes variar entre el yogurt, el kumis, el queso, las leches achocolatadas, entre otros. Los niños mayores de dos años deberían consumir entre dos y tres porciones diarias de lácteos, pues estos cuentan con los ingredientes beneficiosos que necesitan, como lo son las vitaminas, el calcio y el zinc.

Una bebida hidratante

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Para complementar sus onces incluye una bebida que logre mantenerlo hidratado en las actividades físicas que realice durante el día. El agua es la opción más recomendable; si tu hijo no se la toma con gusto, puedes optar por saborizarla con alguna fruta. Además, enséñale a tomarse el líquido al final, pues de lo contrario, podría llenarse y no consumir los demás alimentos.

Recuerda que las porciones varían de acuerdo con la edad y el apetito de los niños.