Por: Redacción Vida y Estilo • Colombia.com

Oración de San Buenaventura para pedir favores urgentes

Si necesitas hacer una petición urgente para obtener un favor de los cielos, reza esta oración de San Buenaventura a la Virgen de los Dolores y a Dios.

Reza esta poderosa oración para pedir un favor urgente a los cielos. Foto: Shutterstock
Reza esta poderosa oración para pedir un favor urgente a los cielos. Foto: Shutterstock

Si necesitas hacer una petición urgente para obtener un favor de los cielos, reza esta oración de San Buenaventura a la Virgen de los Dolores y a Dios.

San Buenaventura, obispo y doctor de la Iglesia, nació en Toscana, Italia, perteneciendo a una familia muy adinerada; a sus 4 años le detectaron una enfermedad grave y lo declararon desahuciado, pero su madre le pidió a San Francisco de Asís que intercediera por él ante el Señor, y que si se curaba, el pequeño se consagraría a su servicio.

San Francisco de Asís lo bendijo y profetizó que sería parte de su Orden; de inmediato el niño se sanó y fue desde allí que se le comenzó a llamar Buenaventura. Cumplió la promesa de su madre, se dedicó a la vida religiosa y vistió el hábito franciscano. Fue ordenado sacerdote después de un tiempo, dedicándose a predicar y visitar hospitales; además, se hizo gran amigo de Santo Tomás de Aquino.

A él se atribuyen numerosos escritos, antes y después de haber sido nombrado ministro general de la Orden Franciscana, pues en los 56 años que vivió dejó 11 volúmenes gruesos que son obras auténticas; además, siendo muy devoto de la Reina de los Ángeles, escribió el Salterio, con 150 salmos.

Este santo siempre pedía que saludaran a la Virgen con la oración del Ángel, pero hay algunas otras plegarias que también se le atribuyen; hoy te enseñamos una oración en su nombre a la Virgen de los Dolores y a Dios, para hacer una petición especial y recibir un favor urgente, compartida por el portal ‘Oraciones del Mundo’.

Oración para pedir favores

¡Oh Virgen dolorosa, unidme al menos a las humillaciones y llagas de vuestro Hijo, para que tanto Él como Vos podáis encontrar alivio al haber alguien que comparta vuestros sufrimientos! ¡Ah, cuán feliz sería yo si pudiese hacer esto! 

¿Habrá quizás algo más grande, dulcísimo, o más ventajoso para una persona? ¿Por qué no me concedéis lo que os pido? Si os he ofendido, sed justa y traspasad mi corazón. Si os he sido fiel, no me dejéis sin recompensa, dadme vuestros dolores.

Y a ti, Señor Santo, Padre Omnipotente, Dios Eterno, por tu generosidad y la de tu Hijo, quien por mí padeció pasión y muerte, por la excelentísima santidad de su Madre, y por los méritos de todos los santos: Concédeme a mí, pecador e indigno de cualquier beneficio tuyo, que sólo a ti ame, que siempre tenga sed de tu amor, que continuamente tenga en el corazón el beneficio de la pasión, que reconozca mi miseria, que desee ser pisado y despreciado de todos y que sólo la culpa me entristezca. Amén.