Oración a San Juan de Dios para pedir la sanación de un niño
Para pedir por la salud de un niño enfermo, para que pueda recuperarse pronto, reza esta oración a San Juan de Dios que te enseñaremos a continuación.
Para pedir por la salud de un niño enfermo, para que pueda recuperarse pronto, reza esta oración a San Juan de Dios que te enseñaremos a continuación.
San Juan de Dios fue un enfermero que se convirtió a la fe cristiana mientras escuchaba un sermón de San Juan de Ávila; decidió dedicar el resto de su vida a la ayuda de los pobres, los enfermos y las personas menos favorecidas, fundando la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios. Se le conoce como santo patrón de los hospitales y los enfermos, por lo que hoy te enseñamos una oración, compartida por ‘Aciprensa’, para pedir la sanación de un niño enfermo.
Oración para la sanación de un niño
Glorioso san Juan de Dios, alma buena y noble que, engrandecido por Dios con su Poder y sus gracias, compartiste los sufrimientos y aflicciones de los demás, ahora que estás junto al buen Jesús, que te honra y no te niega nada, y eres nuestro intercesor ante la salud y la enfermedad, te suplico ruegues por la salud de este niño enfermo y hagas lo posible para que sea sanado cuanto antes (nombre del niño enfermo).
Tú que repartes favores entre todos los que esperanzados imploran tu generosidad y clemencia, como lo acredita una serie continuada de milagros obrados por ti en todos los siglos, naciones y gentes, mira compasivamente a este criaturita y dale tu asistencia y afecto desde los Cielos.
Ayúdale a librar esta dura batalla, no le abandones en este trance difícil y angustioso y envía junto a su cama al Arcángel san Rafael para que, al igual que a ti te ayudó y protegió, sea su amigo y compañero, lo proteja y custodie.
San Juan de Dios, glorioso patrón de los enfermos, que elegiste a los más necesitados y a los que padecían para darles tu amor, cuidados y atenciones por ser ellos la representación del Cristo sufriente, y te esforzaste en hacerles el bien y caridad, en sustentarles, vestir y curar, recibe a (nombre del niño) con amor y caridad y pide por el-ella, para que en breve recupere su energía y vitalidad y sea un niño sanísimo, alegre y dichoso.
San Juan de Dios, esclavo de Jesús y María, suplica con fervor a la Santísima Virgen, que es nuestro amparo y consuelo, acune entre sus amorosos brazos a (nombre del niño) y con sus maternales caricias mitigue sus dolores.
Pide al Niño Jesús, que es vida y salud del enfermo, que con su infinito amor y misericordia limpie su cuerpo de toda enfermedad física y mental, sane sus dolencias y le devuelva la salud, para que tenga una larga y buena vida, nosotros le-la amamos y necesitamos a nuestro lado, (nombre del niño) es nuestra alegría y llena de felicidad nuestras vidas.
San Juan de Dios, bendito y milagroso que tus manos y corazón no se separen de esta criatura que padece y sufre; haz que los doctores y enfermeras que se ocupan de (nombre del niño) reciban luz y guía de Dios Padre Todopoderoso y sean sabios para administrar las medicinas adecuadas.
Danos fortaleza a sus familiares y amigos para que no perdamos la esperanza y sepamos hacer todo lo necesario y preciso para afrontar esta situación con entereza y sin decaer, y sobre todo, pide al Señor que desde las Alturas contemple con ojos de misericordia, visite y sane a su pequeño siervo (nombre del niño) que tanto le necesita.
Bienaventurado e insigne san Juan de Dios, sé que mi pedido será escuchado y por ello te doy las gracias por anticipado, y me mantengo a la espera con toda la esperanza y confianza que mi alma y corazón sean capaces.
Oh Dios concédenos que, siguiendo el ejemplo de san Juan de Dios llevemos en el corazón y manifestemos en la practica el amor a los pobres, a los enfermos y necesitados, y extiende tu acostumbrada bondad sobre (nombre del niño), guarda, cuida y sana a (nombre del niño) que se encuentra afligido por la enfermedad. Padre Dios, concédele la ayuda de tu Poder para que su enfermedad sea cambiada por salud total y la tristeza que ahora tenemos se convierta en gozo. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.