Pobreza y menstruación: Millones de niñas y mujeres no pueden comprar productos menstruales
Según algunas investigaciones, millones de mujeres y niñas de todo el mundo siguen sin poder tener productos menstruales o el acceso a instalaciones con agua limpia para su higiene menstrual.

Según algunas investigaciones, millones de mujeres y niñas de todo el mundo siguen sin poder tener productos menstruales o el acceso a instalaciones con agua limpia para su higiene menstrual.
Según recientes estudios sobre la salud e higiene menstrual, cada mes, más de 2.000 millones de personas en el mundo pasan por este proceso natural y saludable del cuerpo humano; sin embargo, no todas lo viven con tranquilidad y libertad, pues millones de mujeres y niñas que ni siquiera pueden comprar productos menstruales o en el peor de los casos no tienen el acceso a agua y saneamiento.
Muchos llaman a esta problemática “La pobreza asociada a la menstruación” y esto hace referencia a no poder pagar los productos menstruales o acceder a ellos y no contar con instalaciones para poderse asear adecuadamente durante estos días del mes.
Según datos de la OMS y UNICEF, 1 de cada 5 adolescentes y mujeres en las zonas rurales de lugares como Etiopía las mujeres no utilizan ningún material, y una encuesta realizada por Plan International en 2020 reflejó que 3 de cada 10 niñas del Reino Unido tenían dificultades para poder comprar estos productos por el elevado costo que tienen, así que más de la mitad de ellas simplemente los sustituyen por papel higiénico.
Y es que no hay excepciones, en todos los lugares del mundo las mujeres enfrentan dificultades para poder adquirir estos productos que por lo general tienen costos bastante elevados y a veces no son solo los productos, pues aún hay más de 1.500 millones de personas que todavía carecen de servicios de saneamiento básicos, como baños privados con agua limpia.
Incluso esta falta de espacios limpios y privados hacen que muchas niñas tengan que dejar sus clases y algunas mujeres incluso sus trabajos cuando tienen la menstruación, ya que al rededor de esto hay dolores y estigmas de los que poco se habla.
Según unwomen.org 1 de cada 10 mujeres y niñas en zonas rurales de 12 países no disponía de un espacio privado para lavarse y cambiarse durante su última menstruación y es algo que va en aumento por las guerras y las problemáticas sociales, en Gaza más de 540.000 mujeres y niñas en edad no tienen acceso a productos para atender su higiene y salud. Y para muchas mujeres en diferentes lugares del mundo lo ideal es buscar opciones más fáciles y económicas como el uso de trapos o esponjas.