Dormir más de nueve horas al día puede ser perjudicial para la salud, según expertos

En el mundo agitado y lleno de responsabilidades en el que vivimos hoy en día, el sueño se ha convertido en un recurso valioso para mantener nuestra salud y bienestar. Sin embargo, como afirman expertos en el campo de la medicina, el exceso de horas de sueño, más de nueve al día, podría no ser tan beneficioso y por el contrario podría traer algunas consecuencias a largo plazo.

A continuación, te compartimos las razones principales por las cuales dormir más de lo recomendado puede resultar perjudicial para la salud. Recuerda que la clave está en encontrar un equilibrio adecuado para disfrutar de un descanso reparador.

Desde siempre se ha hablado de la importancia de un buen descanso para tener un rendimiento adecuado tanto física como mentalmente; de hecho, la Fundación Española del Corazón indica que dormir bien es esencial incluso para fortalecer nuestro sistema inmune. “Cuando las personas descansan correctamente ayudan al organismo regenerar el sistema inmunitario, mejorar la memoria y reducir el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. También ayuda a perder peso y a reducir el estrés y la depresión”.

Sin embargo, poco se sabe de los riesgos de dormir demasiado. Todos los excesos son malos y el descanso no es la excepción. De acuerdo con Teresa Canet, neurofisióloga y miembro de la Sociedad Española del Sueño (SES), “en condiciones normales, una persona adulta que duerme más de nueve horas diarias estaría durmiendo demasiado”, la experta indica que “es igual o casi igual de malo dormir poco que dormir mucho”. 

Para la experta, dormir más de lo recomiendo puede ser muy peligroso para la salud. Según un estudio realizado por investigadores de Quebec, en Canadá, las personas que duermen más de nueve horas diarias tienen 25 % más de probabilidades de subir de peso que aquellas que duermen entre siete y ocho horas. 

La razón principal sería que aunque las personas mantengan una dieta saludable, dormir mucho disminuye el tiempo disponible de actividad en el día a día y conlleva una disminución de la actividad física, por lo tanto no se pueden quemar las calorías consumidas. 

En el estudio mencionado, los especialistas señalan que dormir demasiado conlleva a otros riesgos cognitivos como la disminución de la concentración y la actividad normal del cerebro. “Cuando una persona duerme demasiado de forma habitual experimenta pérdidas en la capacidad de atención y en la memoria, lo que hace que se vuelva más lento”, dice Canet. 

Por otro lado, duplica el riesgo de padecer diabetes tipo 2 en comparación con las personas que tienen un hábito de sueño saludable entre las siete y ocho horas diarias, ya que aumenta el nivel de azúcar en el organismo. 

Otros estudios indican que el exceso de sueño puede favorecer la aparición de enfermedades como la depresión y la ansiedad o empeorar sus síntomas en personas que la sufren. 

Adicional a todo esto, una de las consecuencias más notorias del exceso de sueño es lo que se conoce como la “resaca del sueño”, ya que entre más se duerme, más somnolencia produce el cuerpo. Esta resaca puede causar mal humor, mareo, dolor de cabeza y cansancio.