La razón por la que siempre debes tomar una ducha después de hacer ejercicio
Expertos aclaran si es necesario o no tomar un baño después de realizar actividad física.
Expertos aclaran si es necesario o no tomar un baño después de realizar actividad física.
Con los agitados ritmos de vida que llevamos hoy en día, en ocasiones no nos queda tiempo ni de respirar; y aunque intentamos organizarnos para hacer todo lo que debemos manteniendo un estilo de vida saludable en el que el ejercicio es primordial, aveces es simplemente imposible cumplir con todo y hay cosas que pasan a un segundo plano.
Una de estas cosas es la ducha después del ejercicio, en especial si realizamos este tipo de actividades en la noche, pues existe el dilema entre dormir justo después para recuperar energías o quedarnos despiertos unos minutos más para acostarnos limpios pero en la mañana tener que volver a ducharnos.
Pero ¿qué tan negativo o positivo puede ser no ducharse después de la actividad física?, expertos de los portales Cadena Dial y Umbrella Sport aseguran que no bañarse después de hacer ejercicio trae efectos nocivos para la salud.
Cuando el cuerpo pasa muchas horas expuesto al sudor, es más probable que contraiga infecciones que causen algún tipo de problema a la salud. A continuación te compartimos los mitos y realidades que existen en torno a la ducha después del ejercicio.
1. Eliminar las toxinas de la piel: esto es verdadero. Uno de los múltiples aspectos positivos que tiene el ejercicio en el cuerpo es la liberación de toxinas; sin embargo, cuando hacemos actividad física y pasamos muchas horas sin bañarnos estas quedan acumuladas en la piel causando irritaciones, brotes y espinillas.
2. Se debe esperar por lo menos una hora después del ejercicio para ducharse: esto es un mito, pues solo basta con esperar unos 20 minutos para que el cuerpo logre regular su temperatura corporal y volver a su estado normal.
3. Es malo bañarse con agua fría después de ejercitarse: esto también es falso, ya que de hecho el agua fría estimula la circulación sanguínea favoreciendo la recuperación de los músculos; sin embargo, si se debe tomar un tiempo prudente para hacerlo.
4. No es necesario hidratar la piel después de la ducha: esto es falso. Cuando realizamos actividad física el cuerpo pierde mucha hidratación, por lo que no solo es necesario tomar mucha agua para recuperarla desde el interior, también se deben usar productos adecuados para devolver la hidratación de forma externa.