Síndrome de Ramsay Hunt: ¿de qué trata la enfermedad de Justin Bieber?

Según lo da a conocer ‘Mayo Clinic’, el síndrome de Ramsay Hunt “ocurre cuando un brote de culebrilla afecta el nervio facial cerca de uno de tus oídos”, aunque es provocado por el mismo virus que causa la varicela, pues una vez esta última desaparece, el virus permanece en los nervios y se corre el riesgo de que años después vuelva a reactivarse, con un estimulante como lo es la culebrilla.

Por su parte, la organización Facial Palsy UK, asegura sobre esto último que una persona es propensa a la reactivación de la varicela cuando el sistema inmune se ve debilitado por diferentes factores, lo cual hace que sea cada vez menos capaz de combatir infecciones.

Una persona que recibe este diagnóstico puede experimentar una parálisis facial o afectaciones en el oído del lado en el que el nervio ha sido alterado; y aunque existe un tratamiento, es indispensable identificar el daño lo más pronto posible para no sufrir graves e irremediables consecuencias, como la debilidad muscular facial permanente, o la sordera.

¿Cómo descubrirlo?

Teniendo en cuenta su origen, el primer signo de alerta es haber tenido una culebrilla que se dejó aumentar más de lo debido; sin embargo, hay algunos síntomas que pueden ayudarte a identificar un caso de Ramsay Hunt, según el mismo portal experto:

• Sarpullido rojo doloroso, con ampollas llenas de líquido, dentro y alrededor del oído.
• Debilidad o parálisis facial en el mismo lado del oído afectado
• Pérdida de audición
• Dolor de oído
• Dificultad para cerrar el ojo
• Boca y ojos secos
• Sensación de vértigo
• Zumbido en los oídos
• Cambios o pérdida del gusto

Es importante conocer que los casos severos del síndrome de Ramsay Hunt pueden llegar a presentarse algunas complicaciones con efectos prolongados o permanentes, tal como lo mencionamos anteriormente, como lo son los daños oculares, la neuralgia posherpética, la pérdida de la audición permanente y la debilidad facial.

¿Por qué se produce?

En cuanto a las causas, la principal es, en efecto, haber tenido culebrilla o varicela, y aunque es más común en personas adultas, hay niños que también pueden contraer dicho síndrome; no obstante, es importante saber que incluso personas que no han tenido varicela pueden ser diagnosticadas con esta enfermedad. Vale la pena mencionar que el estrés puede debilitar el sistema inmune, por lo que puede llegar a ser un desencadenante de este padecimiento.