Por: Juan Carlos García Sierra • Colombia.com

Arrendó un piso de su vivienda a una mujer y se llevó a vivir a 10 personas más

Un hombre en Bogotá arrendó un piso a una mujer y esta se llevó a vivir a 10 personas más. Los inquilinos de nacionalidad venezolana no pagaron alquiler ni servicios y golpearon al arrendador.

Arrendar a migrantes venezolanos se ha convertido en un dolor de cabeza para muchos propietarios de inmuebles. Foto: Youtube
Arrendar a migrantes venezolanos se ha convertido en un dolor de cabeza para muchos propietarios de inmuebles. Foto: Youtube

Un hombre en Bogotá arrendó un piso a una mujer y esta se llevó a vivir a 10 personas más. Los inquilinos de nacionalidad venezolana no pagaron alquiler ni servicios y golpearon al arrendador.

En una pesadilla se convirtió para un dueño de vivienda el arriendo de un piso de su propiedad a una mujer, porque, aunque, la condición es que se alquilaba el lugar solo para ella, esta llevó a vivir al lugar a 10 personas.

Las personas que llegaron a vivir al inmueble, todos de nacionalidad venezolana, estuvieron durante 3 meses sin pagar arriendo ni servicios públicos y cuando el dueño les reclamó por el no pago, estos arremetieron contra él y lo golpearon.

El desespero del hombre dueño del inmueble fue tal que llamó varias veces a la Policía para que lograra mediar en este caso, pero lamenta que la ayuda de la institución fue nula, incluso, en una oportunidad fue golpeado por los mismos inquilinos en frente de los uniformados.

Radicando demandas ante la Fiscalía este hombre espera que se responda por la enorme deuda que ahora tiene por servicios públicos, sin contar con que el proceso por lesiones personales sigue en curso, aunque con bastante lentitud y sin mayor avance.

El dueño del inmueble denunció que los inquilinos venezolanos lo mantienen amenazado e intimidado, además le realizan seguimientos, al igual que a su familia, pero que al poner esto en conocimiento de las autoridades no le dieron solución, porque según él, estas le dijeron que no podían hacer nada porque no había forma de comprobar si quienes realizaban las amenazas pertenecían a un grupo delincuencial.

Conflictos con inquilinos venezolanos

El caso anteriormente descrito es solo uno de miles, pues varios arrendadores han denunciado que, al alquilar un inmueble a ciudadanos venezolanos, estos generan todo tipo de problemas como excesivo ruido, llevan a vivir a un número mayor de personas al convenido, pero especialmente, no pagan arriendo ni servicios públicos.

Varios arrendadores coinciden en que han sido amenazados por los inquilinos venezolanos y hasta han sido víctimas de golpizas e intimidación constante por parte de ellos, por eso muchos dueños de inmuebles han tenido que tomar la determinación de no arrendar a ciudadanos provenientes de Venezuela.

En diferentes oportunidades se han dado a conocer casos en los que inquilinos venezolanos han abandonado inmuebles que han tomado en arriendo sin pagar el alquiler ni los servicios públicos, y no conformes con ello, han desvalijado las viviendas llevándose puertas, pisos, barandas, bombillos y hasta los grifos.

En la Fiscalía General de la Nación existen numerosas denuncias por casos similares, la mayoría, infortunadamente sin ninguna resolución, situación que genera mayor desconfianza y también temor entre la ciudadanía cuando de arrendar a un ciudadano de nacionalidad venezolana se trata.