Elon Musk asegura que los indocumentados ayudarán a demócratas a llegar al poder

Elon Musk es uno de los personajes más controvertidos de los Estados Unidos y también del mundo, El multimillonario y magnate tecnológico es el director del Departamento de Eficiencia Gubernamental, un ente que pretende reducir la burocracia y la corrupción en las entidades estadounidenses y hacer más efectiva su operación.

Elon Musk ha sido uno de los principales defensores de la idea de expulsar migrantes indocumentados y de utilizar diferentes herramientas para ello, el magnate considera que la crisis migratoria en los Estados Unidos obedece a un plan y a teorías conspirativas de miembros del partido demócrata para inundar de ilegales a los Estados Unidos.

Elon Musk asegura que los demócratas conspiran para usar el gasto en beneficios como la seguridad social, Medicare y pagos por discapacidad para atraer en migrantes indocumentados o ilegales con el fin de tomar el control del gobierno estadounidense para siempre, es decir, asegura que indocumentados ingresan en gran número y se les permite el voto con el fin de elegir demócratas en el poder y así perpetuarse en él.

El magnate no ha proporcionado evidencias sobre sus afirmaciones y muchos consideran las palabras del multimillonario sudafricano como paranoicas y a las que no debería prestársele atención, pero otros consideran que esta retórica no es más que la respuesta a la necesidad de modificar la seguridad social y el Medicare para el desvío de sus dineros a otros rubros del estado.

Algunos critican las palabras de Elon Musk por considerar que los indocumentados sencillamente no pueden solicitar seguridad social, Medicare o discapacidades, pues se exige el estatus legal para poder acceder a estos beneficios del estado.

Diferentes análisis de los dineros que entregan los indocumentados en impuestos aseguran que ellos ayudan a pagar los beneficios que tienen los ciudadanos estadounidenses, puesto que colaboran con un importante porcentaje de la recolección de impuestos en los Estados Unidos, por lo que su deportación podría ser un duro golpe financiero para el estado norteamericano.