Latinos viven endeudados en New York por falta de educación financiera: miles recurren a tarjetas de crédito para sobrevivir

Un gran número de latinos en la ciudad de New York viven con ´el agua al cuello´ ante las deudas que los aquejan y que han sido contraídas por créditos y en especial por las compras a crédito, las cuales no se deben a compras suntuosas o relacionadas con el placer y el disfrute, sino que se ven obligados a realizarlas con dinero plástico para poder satisfacer necesidades básicas como alimentación, medicinas y pago de servicios.

Latinos, bien sea, legales o indocumentados, se ven abocados a ampararse en tarjetas de crédito debido al alto costo de los productos de toda natulareza y también porque deben realizar labores no muy bien remuneradas, por eso es común que un migrante cuente con varios trabajos, pero estos comienzan a escasear debido a la cantidad de migrantes que solicitan uno.

Cuando llega el fin de mes el dinero ya se ha agotado en muchas familias latinas y las cuentas no dan espera, por eso las tarjetas de crédito son un producto del que los latinos en New York son asiduos beneficiarios.

Salvación y dolor de cabeza

Al principio, las tarjetas de crédito son vistas como la salvación para poder cumplir con una obligación, pero con la llegada de los cobros con altos intereses, pasan a ser un calvario que tiene a muchos trabajando casi que exclusivamente para pagarlas.

Una de las razones para que esta situación sea tan frecuente entre la comunidad latina radica en que a esta población tan numerosa en la gran manzana le hace falta educación financiera, pues no solo hacen compras de productos básicos que no pueden hacer con dinero en efectivo, sino que también realizan compras innecesarias, las que al final suman varios dólares y representan un dolor de cabeza.

Esta situación ha hecho que la ciudad de New York se encuentre dentro de las primeras ciudades con más deuda por concepto de tarjetas de crédito en los Estados Unidos, cuando hasta hace algunos años era una de las que mejor cumplía con las obligaciones de esta índole.

El asunto se complica con las enormes deudas que se van acumulando y estas no se logran pagar en su totalidad, pues son a base de pagos mínimos que se tratan de palear, generando estrés en los deudores por el cobro constante al que se ven sometidos.