Una ciudad de EE.UU. abre sus puertas a inmigrantes: “todos son bienvenidos” para trabajar

La crisis migratoria en los Estados Unidos ha hecho que varias autoridades y políticos locales promuevan leyes que permitan descongestionar de inmigrantes indocumentados sus territorios, iniciativas que también apoyan miles de ciudadanos.

En plena carrera hacia las elecciones presidenciales de noviembre, los republicanos y sus simpatizantes, exigen soluciones radicales al problema de la inmigración con medidas extremas como la expulsión de todos los que no sean ciudadanos norteamericanos.

Mientras muchas ciudades dicen no tener espacio ni puestos de trabajo para trabajadores venidos del extranjero, otras anuncian que quienes quieran ir a trabajar pueden hacerlo, es el caso de Kansas City.

Quinton Lucas, alcalde la ciudad que lleva el mismo nombre del estado, Kansas City, prefiere ver el vaso medio lleno y considera que su ciudad se vería muy beneficiada con la llegada de trabajadores que buscan asilo y que se encuentran en refugios en condiciones de hacinamiento y con su situación sin resolver.

El alcalde, de filiación democrática, tiene una retórica diferente a la republicana y no llama a quienes ingresaron irregularmente a los Estados Unidos como ´indocumentados´ o ´ilegales´, sino que dice que son personas que solicitan asilo.

Lucas es consciente de que la floreciente economía de su ciudad se puede robustecer con la llegada de trabajadores extranjeros, por eso los invita a su ciudad ofreciendo una bienvenida.

“Todos son bienvenidos en Kansas City”, ha manifestado el alcalde Lucas de 39 años.

Ciudades como New York y Denver se encuentran entre las llamadas ´santuario´ y han acogido extranjeros, pero en el caso de la gran manzana, ya no hay espacio para uno más, y en Denver, no hay presupuesto, por eso están limitando el número de personas que contarán con ayudas.

Los Ángeles y Chicago se están viendo también en dificultades para poder mantener a los recién llegados y atender sus necesidades básicas, presentándose refugios congestionados y sin la posibilidad de recibir más migrantes, la mayoría latinos y provenientes en gran porcentaje de Venezuela y México.

La invitación del alcalde Lucas va en contravía de los pedidos republicanos, pero la política de puertas abiertas plasmada en la Constitución ha sido la base de la nación desde su independencia de Inglaterra.