El investigador colombiano que identificó el cangrejo moderno más antiguo del mundo

En Birmania, país del sureste asiático fue encontrado un cangrejo que quedó atrapado en un ámbar de 100 millones de años, lo curioso es que tradicionalmente se conoce a este tipo de crustáceos como animales de ríos y mares, pero Javier Luque, un investigador colombiano, logró identificarlo como el “abuelo” de los cangrejos modernos.

Javier Luque, geólogo bogotano de la Universidad Nacional e investigador posdoctoral del Departamento de Biología Organísmica y Evolutiva de la Universidad de Harvard, lideró las investigaciones apoyadas por Las universidades de Yale, Harvard, Alberta (Canadá) y la National Sciencie Foundation, que lograron encontrar un animal que ayuda a explicar la evolución de los cangrejos.

Cretapsara athanata fue llamado el crustáceo encontrado en Asia, es el cangrejo fósil más completo que se ha encontrado en la historia, relató al diario El Tiempo el geólogo bogotano, el investigador afirmó que los detalles de este crustáceo encontrado en ámbar son más finos de los que se pueden encontrar en los fósiles de piedra, pues se pueden determinar los ojos compuestos, cola, patas, piezas bucales bigotes microscópicos y hasta las agallas de las branquias.

Para Javier Luque, el cangrejo al parecer se encontraba en el momento y en el lugar equivocado, pues estaba protegido por ámbar, una resina que proviene principalmente de los árboles o plantas con flores, y los cangrejos son animales de agua dulce y salada, por lo tanto, el estudio permite determinar que estos crustáceos realizaron una colonización a ambientes no marinos.

El investigador considera muy importante el trabajo porque logra evidenciar la transición que estos animales realizaron del océano al agua dulce o a la tierra es inusual en animales, pero los cangrejos lo han hecho 12 veces en los últimos cien millones de años.

El trabajo con el cangrejo en ámbar inició en 2018 cuando unos investigadores chinos le comunicaron el hallazgo al investigador colombiano, entonces él se encargó de comprobar que era real y con múltiples estudios en los que usaron herramientas y tecnologías sofisticadas se logró determinar que el crustáceo era único llenaba un vacío en la historia de la evolución de esta especie.

Javier Luque afirma que el cangrejo vivió con dinosaurios voladores, caminantes y animales de la época prehistórica, lo hizo en lagos y cerca de los ríos y lo bautizó Cretapsara athanata en honor al periodo cretácico, tiempo en el que vivió el cangrejo, y Apsara por ser unas deidades de la cultura budista en el este y sudeste de Asia, como homenaje al folclor, la mitología y regional de esta parte del mundo.