Millonarios y un golpe de autoridad: Superó a América en Cali y es más lider que nunca

Uno de los más emotivos partidos de la Liga, al menos en este semestre, tuvo su segunda edición en la tercera fecha de los cuadrangulares semifinales. Hablamos, claro, de aquel partido en el estadio el Campín, entre América de Cali y Millonarios, que terminó definiéndose a favor del cuadro embajador, con un marcador de 4 a 3. Una sensacional lluvia de goles y emociones que mostró así a los dos mejores equipos del torneo.

La suerte quiso que, en cuadrangulares, estos dos equipos quedasen alojados en el mismo grupo, teniéndose que enfrentar por las fechas 3 y 4 de esta fase, primero en Cali, en el Pascual Guerrero y después en Bogotá, nuevamente en el Campín. Así, este nuevo capítulo en casa del cuadro escarlata, representaba el ecuador de la segunda fase, donde una victoria de cualquiera de los dos sería un gran paso en el camino a la final.

De esta forma, el balón rodó en el Coloso de San Fernando, mostrando dos equipos con un ataque letal y que llegaban con la necesidad de llevarse los 3 puntos. La obligación, sin embargo y dada la localía, sería del cuadro rojo, que posteriormente tendría que ir a visitar a Bogotá, por la cuarta fecha de los cuadrangulares.

Pero el partido se movería muy rápido, aunque del lado visitante, luego de un remate mal controlado por Diego Novoa, portero escarlata, quien dejó escapar el balón, entregándoselo a Beckham David Castro, que sin marca puso el primero del partido. En la jugada siguiente América pudo empatarlo, pero no había nada qué celebrar: Edwin Velasco estaba en fuera de lugar.

América siguió cargando y parecía muy cerca del empate, con un Carlos Darwin Quintero que brillaba en el frente de ataque de los diablos rojos. Sin embargo, Juan Pablo Vargas estaba en una noche mágica y se convertía en el muro embajador, por donde nada pasaba. O casi nada… Al minuto 40 Darwin Quintero pudo atravesar la defensa embajadora, pero fue derribado por Jorge Arias. El juez central no dudó y señaló el punto de penal.

El encargado de cobrar fue Facundo Suárez quien tomó impulso, disparó y la mandó ancha. Nada qué hacer para el local: Tenía que irse a los vestuarios abajo en el marcador, luego de atacar la mayor parte del encuentro. El segundo tiempo no cambió, mostrando un asedio constante del local, que fallaba en los últimos metros, razón por la que no encontraba el gol.

El tiempo avanzaba rápidamente y acababa con la esperanza del cuadro americano, que no lograba encontrar el camino de gol. Con el final del encuentro, se consolidó la victoria embajadora con la que los dirigidos por Gamero se trepaban en lo más alto del grupo, con 3 puntos de ventaja sobre América y Boyacá Chicó, y a 6 puntos del Medellín, que se hunde en el fondo de la tabla.