El “jardín de la cocina” en Panaca Sabana

Años atrás las mujeres sembraban semillas alrededor de sus hogares y así descubrieron que era posible obtener un modo de economía más seguro y además un sustento de alimentos en tiempos de escases. Paso a paso esta costumbre se fue extendiendo a través de Estados Unidos y ya no solo eran las mujeres quienes acostumbraban a sembrar en sus viviendas, también los terratenientes empezaron a construir grandes huertos en sus casas a lo que llamaron el jardín de la cocina, costumbre que se reprodujo en casas de empresarios, haciendas cuyos dueñor pertenecen a las altas clases sociales y hasta en la casa Blanca.

A medida que pasó el tiempo, los alimentos orgánicos empezaron a crear un boom en la sociedad, ya que al reproducir esta práctica milenaria se implementaron todos sus beneficios tanto para la salud como para la buena alimentación y la manipulación de los suelos. En la actualidad es todo un atractivo trasladar la tradición de los cultivos del campo a la ciudad y más aún hacerlo de manera personalizada, con el fin de que los individuos tengan acceso a alimentos de calidad con buenas prácticas de siembra.  Algunas ciudades como Boston, impusieron lo que se denominó “camas cultivables”, ubicando materas de diferentes tamaños y colores que adornaban las ciudades, donde sembraban una variedad de alimentos para beneficio de la ciudad.

En Panaca Sabana se puede ver un claro ejemplo de una huerta orgánica ideal, donde además es fácil aprender todo lo relacionado con sus prácticas y beneficios. La estación de agricultura del Parque, es el lugar ideal para interactuar con este tipo de cultivos e incluso ser parte del proceso de recolección de alimentos para llevar a casa.