Por: Jessica Mutis • Colombia.com

Telescopio James Webb sigue impresionando y en esta oportunidad captó un “reloj de arena”

El proyecto lanzado el pasado 21 de diciembre del 2021, ha develado los mejores misterios del universo profundo.

L1527 tiene apenas 100.000 años, por lo cual es un cuerpo celeste relativamente joven. Foto: www.lanasa.net
L1527 tiene apenas 100.000 años, por lo cual es un cuerpo celeste relativamente joven. Foto: www.lanasa.net

El proyecto lanzado el pasado 21 de diciembre del 2021, ha develado los mejores misterios del universo profundo.

De acuerdo a los astrónomos, esta imagen revela datos importantes sobre la formación del sol y el sistema solar, los cuales se verían de manera similar en sus inicios. Esta captura corresponde a una joven estrella en formación, denominada protoestrella que se encuentra en la nube oscura L1527, que solo son visibles en luz infrarroja, razón por la cual la potente estructura equipada con la cámara de infrarrojo cercano (NIRCam) pudo evidenciarla.

Sobre esta imagen compartida por la Nasa, se explica “La protoestrella en sí está oculta a la vista dentro del "cuello" de esta forma de reloj de arena. Un disco protoplanetario de canto se ve como una línea oscura en la mitad del cuello. La luz de la protoestrella se filtra por encima y por debajo de este disco, iluminando las cavidades dentro del gas y el polvo circundantes”.

Además, una nube de material con forma de reloj de arena estalló desde el centro brillante, con la nube de gas naranja semiopaca en la parte superior y el naranja desvaneciéndose hasta convertirse en una nube de gas semiopaca azul brillante en la parte inferior, todo contra un cielo negro salpicado de manchas blancas.

Los expertos también aclaran que L1527 tiene apenas 100.000 años, por lo cual es un cuerpo celeste relativamente joven, lo que le impide generar su propia energía mediante la fusión nuclear de hidrógeno. Dada su edad y su brillo en luz infrarroja lejana, L1527 se considera una protoestrella de clase 0, la etapa más temprana de la formación estelar.

“Las protoestrellas como estas, que todavía están envueltas en una nube oscura de polvo y gas, tienen un largo camino por recorrer antes de convertirse en estrellas de pleno derecho. L1527 aún no genera su propia energía a través de la fusión nuclear de hidrógeno, una característica esencial de las estrellas. Su forma, aunque en su mayoría esférica, también es inestable, tomando la forma de una pequeña masa de gas caliente e hinchada en algún lugar entre el 20 y el 40% de la masa de nuestro Sol”, comenta la Nasa.

El Webb es el principal observatorio científico espacial del mundo, el cual es el sucesor del Hubble, y que tiene como objetivo develar los misterios del cosmos, además de ciertos orígenes de estrellas o formaciones del universo, labor que ha venido desempeñando de manera óptima gracias a su tecnología y capacidad en la cámara.