Nuevo parte de salud de Miguel Uribe Turbay: ¿qué implica el inicio de un protocolo de neurorehabilitación?
Nuevo parte de salud de Miguel Uribe confirma que inició protocolo de neurorehabilitación. Conoce en qué consiste este tratamiento y sus avances.

Nuevo parte de salud de Miguel Uribe confirma que inició protocolo de neurorehabilitación. Conoce en qué consiste este tratamiento y sus avances.
El estado de salud del precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay continúa siendo de interés nacional tras el atentado que sufrió a principios del mes de junio durante un mitin político en la ciudad de Bogotá.
El pasado lunes, la Fundación Santa Fe de Bogotá emitió un nuevo parte médico en el que informó que Miguel Uribe “continúa bajo manejo multidisciplinario en la Unidad de Cuidados Intensivos”. No obstante, ha presentado una evolución favorable frente a las intervenciones y tratamientos, lo que permite dar inicio a una nueva fase en su proceso de recuperación.
El más reciente comunicado sobre la salud de Miguel Uribe Turbay revela que el senador ha iniciado un “protocolo de neurorehabilitación”, un tratamiento especializado clave en su recuperación.
Este proceso busca restaurar funciones neurológicas comprometidas y mejorar su calidad de vida. Expertos en medicina aseguran que este tipo de rehabilitación es fundamental cuando hay afectaciones en el sistema nervioso central.
Según los especialistas de la Fundación Santa Fe, el precandidato presidencial continúa requiriendo la colaboración de varios especialistas, entre intensivistas, neurólogos, médicos y enfermeros para mejorar su condición de salud.
El último parte médico señala que en los últimos días, el paciente ha mostrado una respuesta clínica favorable y estable, lo cual es un buen signo en un contexto crítico. Este progreso se ha evidenciado de dos maneras.
Por un lado, las imágenes diagnósticas, probablemente resonancias magnéticas, tomografías o Doppler, que permiten evaluar el estado del cerebro, el flujo sanguíneo y los órganos internos, han demostrado que el precandidato continúa teniendo en buen estado sus funciones.
Por otro lado, según los especialistas, ha tenido una buena respuesta a tratamientos médicos y quirúrgicos; es decir que está reaccionando de forma positiva a las intervenciones realizadas.
Aunque estos dos aspectos no significan una recuperación total, sí demuestran una mejoría respecto a su condición previa, lo que ha llevado a los expertos a comenzar un protocolo de neurorehabilitación. Este proceso incluye actividades y terapias para:
- Recuperar o mejorar funciones cerebrales, como el habla, movimiento, memoria, etc.
- Estimular respuestas neurológicas.
- Prevenir complicaciones derivadas de la inmovilidad o del estado crítico.
¿Qué es la neurorehabilitación?
Especialistas de la web Top Doctors definen la neurorehabilitación como un “proceso médico que tiene como objetivo ayudar en la recuperación de trastornos neurológicos y de lesiones del sistema nervioso”.
Este procedimiento se utiliza comúnmente para tratar afecciones como la apoplejía, la parálisis cerebral, la enfermedad de Parkinson, el traumatismo craneoencefálico, la esclerosis múltiple, el síndrome postpolio y el síndrome de Guillain-Barré.
La neurorehabilitación se incia con pruebas neurofisiológicas, como electromiografías (EMG) y electroencefalografías (EEG) para proporcionar una evaluación completa de las necesidades del paciente. Tras esto, se da un manejo especializado a cada uno.
Cabe destacar que este protocolo no se hace en todos los pacientes, solo en aquellos que muestran algún grado de estabilidad que permita comenzar una recuperación, una señal bastante positiva para quienes esperan la pronta recuperación del senador Miguel Uribe.
El parte médico destaca que el precandidato presidencial permanece bajo sedación, está conectado a un ventilador mecánico para ayudarle a respirar y es monitoreado constantemente hemodinámicamente, es decir, que se verifica su presión, frecuencia cardíaca y actividad neurológica con regularidad para ver reacciones del sistema nervioso y cardiovascular.
Para finalizar, el comunicado aclara que el pronóstico neurológico de Miguel Uribe sigue siendo reservado, lo que significa que no es posible predecir aun si tendrá una recuperación total, parcial o si podría haber secuelas futuras como:
- Trastornos motores
- Dificultades del lenguaje
- Alteraciones cognitivas (pérdida de memoria, dificultad para concentrarse o mantener la atención, problemas de razonamiento o toma de decisiones y desorientación temporal o espacial).
- Alteraciones emocionales o del comportamiento
- Dependencia funcional (dificultad para caminar, vestirse, alimentarse y asearse sin ayuda, o necesidad de cuidados permanentes o uso de ayudas técnicas como illa de ruedas, andadores, sondas, etc.).