Por: María Andrea Suárez • Colombia.com

ELN y las fuerzas venezolanas ejecutan operaciones conjuntas: HRW

Human Rights Watch (HRW) realizó un informe sobre la situación que vive la población en Arauca y en el estado venezolano de Apure por los enfrentamientos entre el ELN y las disidencias de las Farc.

Éxodo venezolano por violencia en frontera. Foto: EFE
Éxodo venezolano por violencia en frontera. Foto: EFE

Human Rights Watch (HRW) realizó un informe sobre la situación que vive la población en Arauca y en el estado venezolano de Apure por los enfrentamientos entre el ELN y las disidencias de las Farc.

“Múltiples abusos” contra la población en el departamento de Arauca y en el vecino estado venezolano de Apure han perpetrado grupos armados ilegales que se disputan el control territorial.  Así lo denunció Human Rights Watch (HRW) en un informe publicado este lunes. 

De acuerdo con la organización, estos hechos se estarían ejecutando con la complicidad de militares venezolanos. Según el informe, al parecer, "el ELN acusó al Frente 10 (de las disidencias) de cometer abusos contra la población -lo que también hace el ELN-, de dedicarse al narcotráfico y de expandir su presencia a zonas controladas" por ellos.

De igual manera, el documento precisa que los enfrentamientos entre esta guerrilla y el Comando Conjunto de Oriente, alianza grupos disidentes de las extintas Farc, comenzaron el pasado 1 de enero y han dejado decenas de muertos, al menos 3.860 desplazados en Arauca y más de 3.300 personas que han huido de Venezuela a Colombia.

"Los grupos armados están cometiendo abusos brutales contra civiles en la frontera entre Colombia y Venezuela, en algunos casos con la complicidad de miembros de las fuerzas de seguridad venezolanas, y la respuesta de las autoridades colombianas ha sido inadecuada e insuficiente", manifestó la directora en funciones para las Américas de HRW, Tamara Taraciuk.

En ese sentido, el informe indica que esos militares venezolanos "han realizado operaciones conjuntas con miembros del ELN y han sido cómplices de sus abusos", situación que puede derivar en "investigaciones internacionales sobre presuntos crímenes de lesa humanidad".

Para el desarrollo de esta investigación, Human Rights Watch visitó en febrero los departamentos de Arauca y Vichada y entrevistó a más de cien personas entre líderes sociales e indígenas, funcionarios judiciales y autoridades locales.

La organización también habló con representantes de organizaciones humanitarias y de derechos humanos, así como civiles, de los cuales 43 aseguraron haber huido de Apure por los enfrentamientos entre el ELN y las disidencias de las Farc.

HRW indica que dichos grupos "utilizan la violencia para controlar la vida cotidiana de las personas. Imponen sus propias reglas, incluyendo toques de queda, la regulación de la pesca, el pago de deudas y el horario de cierre de los bares, y establecen sus propias sanciones para casos de violaciones, robos y asesinatos”.

A su vez, el informe precisa que muchos entrevistados dijeron que miembros del ELN buscaron a personas que acusan de colaborar con las disidencias, algunos de ellos fueron asesinados, mientras que los otros fueron secuestrados. 

Finalmente, el organismo afirma que las autoridades han intentado disminuir el poder de los grupos armados en Arauca con el fortalecimiento de las Fuerza Pública pero que dichas operaciones "no han protegido suficientemente a la población".

"Las autoridades colombianas deben redoblar urgentemente sus esfuerzos para proteger a la población y asistir a las personas desplazadas, y la Misión de Determinación de los Hechos de la ONU debe investigar la responsabilidad de las fuerzas de seguridad venezolanas en los abusos de las guerrillas", instó Taraciuk.