Organizaciones religiosas demandan a Donald Trump por redadas en iglesias

La política de inmigración que adelanta el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ataca directamente a los indocumentados y su principal estrategia es la de la realización de redadas masivas adelantadas por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas.

Controvertida norma

Con el ánimo de optimizar las detenciones, el presidente Donald Trump tumbó la norma por la cual se prohibía abordar a inmigrantes ilegales en escenarios como instituciones educativas, centros médicos y lugares de reunión de carácter religioso como iglesias o sinagogas, entre otros.

La determinación de Donald Trump no ha caído bien entre las diferentes filiaciones religiosas en los Estados Unidos y estas no tardaron en manifestarse, primero con el arzobispo de la ciudad de Miami, Gerard Wenski, quien aseguró que a las iglesias de la ciudad del Sol no entraría ningún agente del ICE a realizar redadas.

Luego de la manifestación de Wenski, una agrupación de 27 organizaciones religiosas de distintas denominaciones, entre ellas bautistas, judíos, conservadores y reformistas evangélicos y luteranos, entre otros, presentaron una demanda en contra del presidente Donald Trump por permitir las redadas migratorias en lugares de concentración religiosa informó la agencia EFE.

Para la agrupación de Iglesias, la orden emitida por el presidente Donald Trump el 21 de enero tiene legalidad en cuestión y se interpuso una demanda ante la Corte Federal del distrito de Columbia.

La demanda considera que no se debieron revocar las normas impuestas en la administración de Joe Biden, según las cuales existían áreas protegidas y en donde las redadas se prohibían, dichas áreas contemplaban escuelas, instituciones médicas y hospitalarias e Iglesias, que luego se extendieron a parques públicos.

“La libertad religiosa de nuestras iglesias y de nuestros miembros está siendo atacada”, declaró a EFE Carlos Malavé, presidente de la Red Nacional Cristiana LCNN.

Malavé aseguró que nunca antes se había vivido una situación como la que actualmente se atraviesa, en la que muchos feligreses están temerosos y que además han dejado de asistir a los oficios religiosos por redadas y detenciones permanentes.

El pastor evangélico aseguró que esta situación se parece mucho a la vivida en pandemia en la cual la gente no asistía a los servicios religiosos por el miedo al contagio de la Covid-19 y que ahora no lo hace, pero por el miedo a la detención migratoria.